Rajoy entiende a los que han dejado de votarles pero no cambiará su Gobierno

  • Los partidos siguen haciendo balance de los resultados de las elecciones europeas del domingo y así, por ejemplo, el jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dicho entender a los ciudadanos que han podido dejar de votar al PP, aunque ha avanzado que no tiene intención de hacer cambios en el Ejecutivo.

Madrid, 27 may.- Los partidos siguen haciendo balance de los resultados de las elecciones europeas del domingo y así, por ejemplo, el jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dicho entender a los ciudadanos que han podido dejar de votar al PP, aunque ha avanzado que no tiene intención de hacer cambios en el Ejecutivo.

En sus primeras declaraciones tras los comicios, Rajoy ha recordado desde Bruselas que el PP ha ganado las elecciones y ha agradecido su apoyo a todas las personas que han votado a su partido después de unos tiempos "muy difíciles" en los que ha habido que tomar decisiones muy complicadas que no habrán gustado a mucha gente.

"Entiendo a aquellas personas que en su día nos dieron su confianza y ahora nos la han retirado", ha reconocido Rajoy, que no cree que estas elecciones sean el fin del bipartidismo.

A su juicio, en los países en los que hay más estabilidad política, progreso y bienestar es en los que hay grandes partidos "moderados y centrados", como ha dicho que ocurre también en Estados Unidos, Alemania o muchos otros socios de la UE.

Ha abundado en esta idea el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, que está convencido de que su partido recuperará los votos perdidos cuando acometa las medidas que se corresponden más con su programa electoral, entre ellas la bajada de impuestos, y que hasta ahora no ha podido poner en marcha por las dificultades económicas.

Al margen de la crisis abierta en el PSOE, los comentarios y análisis en los 'corrillos' políticos se han centrado de nuevo hoy en la irrupción sorpresiva de Podemos, el partido liderado por el televisivo Pablo Iglesias.

Desde IU, partido que comparte buena parte de ese espacio ideológico, José Luis Centella ha dejado claro que "no compiten" con la formación de Iglesias.

De hecho, Centella se plantea el "reto apasionante" de la unidad de la izquierda, un objetivo "que no es nuestro -ha dicho-, sino que es lo que nos pide la gente en la calle".

Además, a su juicio, Podemos no les ha "robado" votos porque, según Centella, a quien les ha quitado apoyo es a los que han perdido, en referencia a los socialistas.

No obstante, sí ha habido algo de autocrítica en las filas de IU como la de Gaspar Llamazares, que ha reconocido que Podemos, la gran revelación de las europeas, ha conectado "mejor" con los jóvenes.

Considera Llamazares que la llegada de este partido obliga a IU a "negociar" al no ser ya la única fuerza política a la izquierda del PSOE.

Una lectura que se hace también fuentes de la dirección de IU, que admiten que quizá no hayan sabido "capitalizar" el descontento de muchos ciudadanos.

La entrada de Podemos en el panorama político también ha levantado suspicacias, como las de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que se ha referido a ellos como "grupúsculos radicales, anticonstitucionales, antisistema" y que "apoyan las dictaduras de izquierdas".

Un mensaje con alguna similitud al lanzado por la portavoz de UPyD, Rosa Díez, quien ha indicado que el discurso de Podemos es idéntico al de Syriza en Grecia o al de Beppe Grillo en Italia, pero también tiene "coincidencias enormes" con el del Frente Nacional francés en determinados asuntos, como el euro.

Menos críticos han sido los portavoces del PNV y de CiU en el Congreso, Aitor Esteban y Pere Macías, quienes han dado la bienvenida a la nueva formación, si bien han mostrado dudas sobre su capacidad para mantenerse.

"El tiempo dirá si se consolida, esas grandes promesas además de ponerlas en un papel hay que ponerlas en la práctica", ha dicho Esteban, mientras Macías ha opinado que la llegada de Podemos será beneficiosa, pero habrá que ver si tiene continuidad.

En esa línea se ha manifestado el portavoz parlamentario del PP, Alfonso Alonso, para quien Podemos, tras un resultado "extraordinario", afronta el reto de "pasar de la tele al escaño, de la protesta a la solución y de la tertulia a la propuesta".

Desde el entorno del PP, el sociólogo Pedro Arriola ha pronosticado que el éxito del partido de Iglesias será pasajero, ha subrayado el buen uso que ha hecho de la televisión y ha añadido: "Aquí en Madrid hay de todo, todos los frikis acaban planeando sobre Madrid".

Y también el expresidente del Gobierno Felipe González ha ironizado sobre el espectacular crecimiento de algunas fuerzas políticas en las últimas elecciones europeas, al afirmar que la revolución bolivariana "se está poniendo de moda en España". EFE

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