Timerman viaja a la ONU por firma de Tratado sobre Comercio de Armas

  • El canciller argentino, Héctor Timerman, viajará hoy a Nueva York para participar este lunes de la firma en la sede de Naciones Unidas del primer Tratado sobre el Comercio de Armas, informaron fuentes oficiales.

Buenos Aires, 2 jun.- El canciller argentino, Héctor Timerman, viajará hoy a Nueva York para participar este lunes de la firma en la sede de Naciones Unidas del primer Tratado sobre el Comercio de Armas, informaron fuentes oficiales.

La Cancillería argentina indicó en un comunicado que Timerman participará en Nueva York de distintos eventos relacionados con el tratado y dará su discurso junto al secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon.

El Ministerio de Exteriores argentino destacó que el Tratado sobre el Comercio de Armas es el primer instrumento internacional para regular las transferencias de armas convencionales, a fin de prevenir y combatir su tráfico ilegal.

Según el comunicado, Naciones Unidas ha señalado que la falta hasta ahora de regulaciones en la exportación de armas convencionales ha permitido que éstas sean derivadas al tráfico ilegal, "que alimenta la inseguridad ciudadana, la violencia de las organizaciones criminales trasnacionales y la concreción de actos terroristas".

Argentina recordó hoy que desde el inicio formó parte del grupo de siete países que, en el ámbito de las Naciones Unidas, impulsó esta iniciativa, que demandó casi ocho años de trabajo sostenido para su firma.

"Esta acción que nuestro país ha desarrollado junto con Australia, Costa Rica, Finlandia, Kenia, Japón y el Reino Unido, sobre la base de una idea del expresidente de Costa Rica y premio Nobel de la Paz, Óscar Arias, hoy ha culminado en este importante tratado", destaca el comunicado.

El tratado fue adoptado por las Naciones Unidas el pasado 2 de abril, con su aprobación en la Asamblea General por 153 votos a favor, 3 en contra y 23 abstenciones.

La puesta en funcionamiento del acuerdo se producirá a partir de este lunes, con su firma por parte de distintos Estados miembros de Naciones Unidas.

El tratado establece criterios específicos para que los Estados evalúen cualquier operación de importación o exportación de armas convencionales.

Su objetivo es prevenir que las armas involucradas en esas operaciones vayan al mercado ilícito, ya sea dentro del país comprador, o mediante su tráfico ilegal hacia terceros países, que sean utilizadas para cometer actos terroristas, crímenes de lesa humanidad o violaciones del derecho internacional humanitario.

Mediante este acuerdo, los países se comprometen además a hacerse responsables por las ventas de armas y subordinar estas operaciones al derecho internacional.

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