TRÁFICO. ATASCOS EN MADRID, BARCELONA Y SEVILLA AL INICIO DE LA OPERACIÓN SALIDA

La operación salida del verano comenzó a las 15.00 horas de este viernes con retenciones en las principales salidas de Madrid, Barcelona y Sevilla, y con atascos puntuales en carreteras de Albacete, Cádiz, Córdoba, Málaga, Murcia y Valencia.
Según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) sobre el estado de las carreteras, recogidos por Servimedia, la provincia más afectada por el tráfico irregular era Madrid, con tramos de retenciones en la M-40 hacia la A-2 (siete kilómetros), la A-3 (ocho), la A-5 (dos) y la A-6 (once).
Además, a las tres de la tarde había dificultades circulatorias en las salidas de la capital desde la A-1 en San Sebastián de los Reyes hacia Irún (tres kilómetros), la A-2 desde Madrid hacia Barcelona (dos), la A-3 en Rivas-Vaciamadrid en sentido Valencia (dos) y en Torrejón de Ardoz hacia Zaragoza (seis), la A-4 desde Madrid y desde Pinto en dirección a Córdoba (dos y seis, respectivamente), la A-5 en Móstoles hacia Badajoz (dos), la A-6 en Madrid y en Las Rozas hacia A Coruña (tres y cuatro, respectivamente), y la A-42 en Getafe hacia Toledo (cuatro).
En Barcelona estaban afectadas las rondas, como la B-10 (siete kilómetros en sentido sur hacia el Nudo del Llobregat y 13,5 kilómetros en sentido norte hacia el Nudo de la Trinidad) y la B-20 (siete kilómetros en sentido norte hacia el Nudo de la Trinidad).
La C-32 en Esplugues de Llobregat hacia Barcelona, la C-17 en Lliça de Vall hacia la capital catalana, la B-20 en El Papiol hacia el enlace con la AP-7, la AP-7 en El Papiol en sentido Martorell y en Santa Perpetua de Mogoda hacia Tarragona y la A-2 en San Joan Despí hacia Barcelona también tenían retenciones.
En Sevilla, el tráfico lento estaba en cuatro tramos de la SE-30, la A-4 hacia la capital andaluza, la A-49 en Camas hacia Ayamonte, la A-376 hacia Utrera. En Valencia ocurría algo similar en la V-31 en Catarroja en dirección a la capital valenciana, la CV-30 en Paterna hacia la V-30, la N-220 hacia la V-30, la V-30 hacia la A-7 y la A-3 en sentido entrada a Valencia.
También se registraron atascos en Murcia (A-7 en la capital), Málaga (A-7 en Arrollo de la Miel-Benalmádena Costa hacia Cádiz y en San Pedro de Alcántara), Cádiz (A-4 en Puerto Real hacia Tres Caminos), Córdoba (A-4 en Córdoba hacia Sevilla) y Albacete (CM-3213 en Lietor, cortada por un incendio).
84 MILLONES DE VIAJES
La DGT puso en marcha esta tarde la primera gran operación del verano, ante la salida de sus lugares habituales de residencia de miles de personas que inician sus vacaciones. Tráfico espera que durante los meses de julio y agosto haya unos 84 millones de desplazamientos de largo recorrido (de al menos 50 kilómetros) por las carreteras españolas con motivo de las vacaciones estivales, lo que supone la cifra más alta desde el verano de 2009 y un 3,7% más que en 2015. El dispositivo especial concluirá el domingo 28 de agosto y tiene como objetivo velar por la seguridad y la fluidez de la circulación.
Tráfico prevé que en este periodo haya 84 millones de trayectos de largo recorrido por carretera (41 millones en julio y 43 millones en agosto), lo que supone un 3,7% más que los 81 millones del año pasado y el volumen de desplazamientos más elevado desde 2009, cuando se contabilizaron 85,9 millones.
El dispositivo especial de verano tendrá nuevas medidas. Una de ellas es que se colocarán señales verticales fijas de los primeros 300 tramos identificados como los más peligrosos en carreteras convencionales (de un único carril por sentido), salvo en Cataluña y País Vasco, cuyos gobiernos tienen transferidas las competencias. La señal se colocará debajo de la de limitación genérica de velocidad y es rectangular y de color naranja. En esos lugares habrá más control y vigilancia con medios policiales o automáticos.
Además, la DGT instalará aparatos que informen de la velocidad a la que circulan los conductores, como ocurre en algunas travesías o vías urbanas, y, por primera vez en la historia, Tráfico ha comprado 60 nuevos radares ligeros para los motoristas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, que los instalarán en puntos fijos con un trípode y podrán hacer controles integrales a los conductores.
Por último, se incrementará la vigilancia en autopistas y autovías con radares Pegasus, instalados en helicópteros de la DGT, que controlarán los excesos de velocidad, la distancia de seguridad y el uso del cinturón y de los teléfonos móviles.