Despeñaperros ha sido siempre la puerta de acceso, el paso franco entre la Meseta y Andalucía. Hubo un tiempo, hace unas décadas, en que ascender el puerto era una tarea hercúlea para los coches que debían entrar con una marcha suficientemente corta con la fuerza necesaria como para empujar hacia arriba el vehículo cargado y fatigado tras casi tres horas de viaje por la N-IV desde Madrid. Entonces, era obligado parar a reponer fuerzas y descansar tras haber coronado el puerto con éxito. Una opción divertida era el singular Casa Pepe, pero en La Perdiz se comía mejor.
En el kilómetro 268 de la N-IV, en el Hotel La Perdiz, se realizaba el ansiado alto en el camino tras varias horas de conducción y de haber vencido las cuestas del puerto, para disfrutar del premio merecido. Un aparcamiento cubierto protegía el vehículo del sol. Nada más cruzar la puerta, cambiaba la percepción del viaje. El calor se apagaba en los cómodos sofás en los que se descansar un rato antes de pasar al restaurante. Tres ambientes para elegir el lugar de la comida: La zona de barra, más rápida, para una parada más corta, el comedor y la terraza cuando el sol no apretaba demasiado.
La cocina hace honor al nombre, espléndido recetario de caza entre cuyos platos más señalados destacan su famoso paté de perdiz, buenas ensaladas y huevos en distintas preparaciones suelen completar los primeros platos. En invierno la sopa de cebolla o las judías con perdiz son dos opciones a tener en cuenta. Entre los principales platos más contundentes y suculentos como la pata de cabrito, la perdiz escabechada, los populares escalopitos de lomo de venado en tradicional salsa de ciruelas, las chuletillas de cordero y una estupenda carrillera de cerdo ibérico. El arroz con conejo de campo es otra opción para compartir.
Jaén es el mayor productor de aceite de oliva del mundo. El paisaje en Despeñaperros alterna monte bajo y olivos que se mantienen de suave color verde durante prácticamente todo el año. El Hotel La Perdiz tiene sus propios olivares y elaboran sus propio AOVE que deben de probar. Como el establecimiento abre a las cinco de la mañana para empezar a dar de desayunar a los primeros conductores que circulan por la carretera, su café y tostadas con aceite son insuperables, incluso para tomar a media mañana.
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