Toyota Motor, el mayor fabricante de coches del mundo por unidades vendidas, registró fuertes ascensos en bolsa (+4,7%) este miércoles en Tokio y se eleva un 6% en Nueva York después de la presentación de sus resultados trimestrales y al elevar su pronóstico de ganancias para 2023 por la debilidad del yen que le está llevando a un récord de ventas fuera de Japón.
De julio a septiembre (su segundo trimestre fiscal), el beneficio neto de Toyota marcó un récord de 1,44 billones de yenes (9.000 millones de euros), un 155% más que el año anterior en el mismo periodo y destroza la estimación del consenso de analistas de 1,1 billones de yenes (6.900 millones de euros), según Bloomberg. Las ventas crecieron un 24%, hasta 11,4 billones de yenes (71.000 millones de euros).
En el primer semestre fiscal (abril-septiembre), Toyota ganó un 117% más que en el mismo periodo del año anterior con un beneficio de 2,4 billones de yenes (17.000 millones de euros) y unas ventas de 20,38 billones de yenes (130.000 millones de euros), según el informe enviado al regulador bursátil.
Además del efecto divisa, que incrementa los ingresos repatriados desde otras economías con dólares o euros, la compañía cita una sólida demanda global de vehículos y la mejora en las cadenas de suministro como claves en sus cuentas. La resolución de la crisis de los microprocesadores registrada en los últimos años ha llevado al gigante nipón a pasar página en los problemas de fabricación.
La automotriz anunció además que recomprará hasta 100.000 millones de yenes (630 millones de euros) o el 0,44% de sus propias acciones. Toyota es el mayor grupo del sector cotizado en bolsa (ex Tesla) con una capitalización de 220.000 millones de euros. Su cotización apunta ahora a los máximos históricos que marcó en septiembre cerca de los 2.900 yenes por acción.
Según la empresa, el beneficio operativo debería alcanzar 4,5 billones de yenes (28.000 millones de euros) para el año fiscal que termina en marzo, en comparación con la orientación anterior de 3 billones de yenes (19.000 millones de euros).
Desafío eléctrico
Toyota registró ventas récord de 5,6 millones de vehículos de abril a septiembre, lo que lo coloca en camino de alcanzar su objetivo de 11,4 millones de unidades para el año fiscal y mantenerse como el fabricante de automóviles número 1 del mundo.
Los resultados muestran que la demanda de sus sistemas híbridos y de combustión persiste, incluso cuando empresas como la china BYD o la estadounidense Tesla toman la delantera en la transición a vehículos eléctricos.
Toyota redujo su objetivo de ventas de vehículos eléctricos (VE) para el año fiscal actual a 123.000 unidades, desde las 202.000 unidades anteriores. Vendió 58.984 en el semestre que finalizó en septiembre, en su mayoría fuera de Japón.
La compañía ha intensificado sus esfuerzos en VE, anunciando el martes una inversión adicional de 8.000 millones de dólares en una planta en Carolina del Norte (EEUU) que fabricará baterías para modelos eléctricos e híbridos.
