Al circular en un entorno urbano, el embrague no siempre representa un aliado cómodo. Para evitarlo, existen varios modelos de reducido tamaño en cuyas gamas no faltan alternativas a una caja manual. Vienen acompañadas de motores de gasolina, a menudo de entre ochenta y noventa caballos, y sus precios parten de menos de 10.000 euros.
Los menos costosos son el Hyundai i10 y el Toyota Aygo, este último recientemente puesto al día, dado que pueden adquirirse con los grados de dotación más sencillos. Los intermedios satisfarán a los que prefieran el suyo con conectividad para móviles y distintas formas de decorar el exterior y el interior de su vehículo.
El fabricante coreano propone dos motores para su utilitario i10 de 3,67 metros y cinco puertas a quienes deseen el cambio automático de cuatro velocidades. El menos potente genera 66 CV y su precio asciende a 9.865 euros aplicando la rebaja actual. El más prestacional, de 87 CV, parte de 12.565 aprovechándose de la citada oferta. El primero gasta 5,6 l/100 Km en recorrido mixto y el segundo, 6,2.
La versión de 66 CV se asocia exclusivamente al acabado Go!, de serie con aire acondicionado, elevalunas eléctricos delanteros, volante y pomo de cambio forrados en cuero y conexiones auxiliar y USB. La de 87 se puede adquirir con el Go! Plus, que añade Bluetooth, Android Auto y Apple CarPlay y navegador, o con el Style, dotado de sensores de aparcamiento traseros y techo solar.
El nuevo Aygo, a diferencia de otros modelos de su segmento, conserva la caja de cambios automática tras la actualización de 2018. Está disponible tanto con la carrocería de tres puertas como con la de cinco, y en todos los acabados posibles. Toyota promociona el más económico, el x-play, por 11.340 euros -210 más si se opta por cinco puertas- beneficiándose del descuento vigente.
El único motor ofrecido es uno de gasolina de 72 CV. Con la caja automática de cinco marchas, el Aygo acelera de 0 a 100 Km/h en 15,2 segundos, alcanza los 160 Km/h y gasta 4,2 l/100 Km. Esta configuración se puede combinar con el techo corredizo opcional del Pack Sky, que cuesta 1.000 euros. En cualquier caso, la compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay es de serie.
Pariente muy cercano del Aygo, el modelo de la marca francesa utiliza idénticos motor y caja de cambios. Pero la puesta al día de su gama en marzo de 2018 eliminó su variante de tres puertas. Las prestaciones que declara tampoco varían con respecto al Toyota, incluidas las emisiones de 95 g/Km de CO2 en ciclo combinado. Peugeot lo anuncia con este cambio desde 12.290 euros.
El acabado más sencillo, el Active, cuenta por defecto con pantalla táctil desde la que manejar aplicaciones de móviles Android y iPhone, luces diurnas LED y ayuda al arranque en pendiente, entre otros elementos. Puede pedirse igualmente con el nivel superior Allure, con el que ya se ofrece el techo corredizo TOP! Desde 13.710 euros, pero no con la serie especial Collection.
El Picanto, de 3,6 metros justos, se posiciona a medio camino entre los 3,47 y 3,48 del trío formado por los C1, 108 y Aygo y el Hyundai i10. Destaca entre ellos al ser el que brinda el cambio automático con un acabado especialmente equipado y de aspecto deportivo. El GT Line, desde 12.233 euros, se caracteriza por llantas y parachoques de diseño más vistoso, tapicería específica, pedales de aluminio y volante forrado en cuero.
Se suman al resto del equipo de serie, que abarca sensor de luces, control de crucero con limitador de velocidad o climatizador automático. Kia une la caja y el acabado citados al motor de gasolina de 84 caballos, el más potente de la gama. Con ellos, el utilitario realiza el 0 a 100 Km/h en 13,7 segundos y su velocidad máxima es de 161 Km/h. El consumo medio se sitúa en 5,9 l/100 Km.
Por algo más de dinero que el 108, el tercer compañero de plataforma del Aygo, el Citroën C1, cuenta una historia muy similar a la del Peugeot. En la misma fecha dejó de venderse la carrocería con el menor número de puertas y se introdujo el nuevo motor de 72 CV. La diferencia estriba en que, con cambio automático, no es posible encargarlo en su silueta descapotable, que Citroën denomina Airscape.
Si se selecciona esta caja, la lista de grados de equipamiento del C1 se reduce al City Edition, que cuesta 12.500 euros. Es más completo que el Feel, al tener ya de serie las llantas de aleación de quince pulgadas y el volante de cuero. Se puede personalizar con techo de color negro por 200 euros, así como los característicos adhesivos del modelo con los que Citroën permite adornar la carrocería a gusto del cliente.
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