La financiación de la transacción se ha producido en su totalidad con fondos propios de Squirrel y el grupo sueco ha sido comprado "libre de cualquier tipo de deuda y contingencia".
Esta operación ha tenido lugar finalmente este viernes, después de que se retrasase por determinados problemas operativos que eran "íntegramente achacables" a la productora y "totalmente ajenos" al grupo de comunicación.
La empresa continua su estrategia de crecimiento y se hace con una participación importante de la plataforma especializada en la emisión de deportes minoritarios y divisiones inferiores de fútbol.
La distribuidora española se realiza bajo la marca 'La Nueva TV' e incluye series y programas actualmente en televisión tales como 'Madrileños por el mundo', y gestiona los intereses comerciales de Caracol TV.
El grupo estudia hacerse con más del 51% de una compañía radicada en Nueva York, a la que seguirá otra de mayor tamaño ubicada en Los Ángeles, en línea con su plan de consolidar su presencia en el continente.