¿Puede el PSOE expulsar a los diputados que voten no a Rajoy? Hay cuatro sanciones para los rebeldes

  • La Gestora del PSOE ha amenazado a los diputados que incumplan el mandato del Comité Federal con sancionarles. Hay 15 rebeldes.

    Ferraz habla de revisar la relación con el PSC, de multar a los díscolos, de expulsarles del grupo parlamentario o de pedirles que dejen el acta.

Los diputados del PSOE pueden ser expulsados del grupo y ser expedientados si rompen la disciplina de voto
Los diputados del PSOE pueden ser expulsados del grupo y ser expedientados si rompen la disciplina de voto
EUROPA PRESS

Quince diputados de los 84 (+ uno contando al canario Pedro Quevedo) diputados del PSOE siguen enrocados a día de hoy en el "no es no" a pesar de que el Comité Federal de este domingo imponga la abstención de todo el grupo. En este momento, quienes se resistan a facilitar el gobierno de Rajoy son: los siete parlamentarios del PSC, Pedro Sánchez, Margarita Robles, Sofía Hernanz y Pere Joan Pons (de Baleares), Odón Elorza, las gallegas Pilar Cancela y Rocío de Frutos, y Susana Sumelzo.

Ante esta negativa, ¿qué decisión podría tomar el PSOE si estos quince diputados rompen la disciplina de partido? Hay varias posibles sanciones:1. Que entreguen el acta de diputado

La opinión de la gestora del PSOE es que los díscolos deberían marcharse del Congreso y entregar su acta. La facción andaluza deslizó la idea este mismo miércoles. El susanismo cree que todos los díscolos deberían entregar su acta si no van a cumplir con el mandato del Comité Federal. "Yo, antes de desobedecer lo que dice el máximo órgano del partido, entregaría el acta", señaló Juan Cornejo, mano derecha de Susana Díaz en el PSOE andaluz.Existe un precedente de un senador que dejó su acta porque no quiso votar lo que le proponía el grupo parlamentario. Fue Tomás Gómez en noviembre de 2013 quien abandonó su escaño porque no quiso votar a favor de la propuesta de su partido de apoyar al juez Francisco Gerardo Martínez Tristán como nuevo vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El magistrado había frenado la paralización de la privatización de la sanidad madrileña.La decisión, en cualquier caso, le corresponderá a cada parlamentario: el acta es de cada diputado y nadie puede quitársela u obligarle a que renuncie a ella.2. Romper con el PSC y crear un PSOE en CataluñaEs una amenaza dirigida a los siete diputados del PSC. El partido que dirige Miquel Iceta va a decidir el lunes mantenerse en el "no es no", postura ante la que Ferraz ya ha deslizado que habría que tomar una decisión. Ha sido Mario Jiménez, andaluz y portavoz de la Gestora, ha hablado de "evaluar" la relación entre el PSC y el PSOE si los catalanes siguen encerrados en la negativa, rompiendo así una posible resolución del Comité Federal. Ambos partidos tendrían que "hablar con honestidad y claridad sobre ese escenario que se produciría", ha afirmado en una entrevista en Cuatro.Hay quien habla también de que habría que expulsar al PSC de los órganos del PSOE. Es decir, habría que echarles del Comité Federal y no podrían participar en los congresos federales. También hay algún diputado que, llegado el caso, sería el momento oportuno para que el PSOE rompiera con el PSC y creara su propia marca electoral en Cataluña.3. Multa a quienes se salten la disciplina de votoLos Estatutos Federales del PSOE, aprobados en el 38 Congreso Federal, recogen en el artículo 78 que "en todos los casos, las personas miembros del Grupo Parlamentario Federal están sujetas a la unidad de actuación y disciplina de voto. Si no la respetasen, el Grupo Parlamentario y la Comisión Ejecutiva Federal podrían denunciar su conducta al Comité Federal".El PSOE recoge en su normativa interna cuáles serían las sanciones en casos de indisciplina de voto. La rebelión saldría relativamente barata: los socialistas establecen multas de hasta 600 euros dependiendo de si los hechos son leves o graves. Esta sanción se descuenta de la nómina siguiente de forma automática.Además de la sanción económica, en el caso de los dos partidos mayoritarios, romper con la disciplina de voto podría salir mucho más caro, más si cabe tratándose de una votación tan importante como la investidura de un presidente del PP.

Teniendo en cuenta que el sistema de listas es cerrado, los diputados que deciden romper la disciplina de voto se enfrentan a no ser incluidos en las siguientes convocatorias y que sus carreras políticas incipientes terminen definitivamente por llevar la contraria a la decisión mayoritaria del grupo. 

El PSOE "podrá sancionar la emisión del voto contrario a la orientación acordada por el Grupo, cuando ésta se haya realizado de forma voluntaria y haya sido manifestada explícitamente, sin perjuicio del mecanismo disciplinario previsto en los estatutos federales del PSOE", se puede leer en el Reglamento del PSOE en sus artículos 33 y 34.4. Expulsión del Grupo parlamentario

Otra posible sanción que le podría caer a quienes se salten la disciplina de voto es la expulsión del Grupo Parlamentario socialista. Tendrían que pasar al Mixto, como le ha ocurrido a Rita Barberá en el Senado o como le sucedió a Gómez de la Serna en la pasada legislatura.

"Si la actuación originada por esa persona del Grupo se estimase grave por el Comité Federal, éste tendría facultades para proceder a darle de baja en el Grupo Parlamentario, procediendo a incoar el correspondiente expediente, que será tramitado por la Comisión Federal de Ética y Garantías para que dicte las resoluciones a adoptar", se puede leer en el artículo 6 de la Normativa reguladora de los cargos públicos del PSOE.

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