En declaraciones en el Congreso, donde ha participado en la moción de censura que encabezará Pablo Iglesias, el líder de IU se ha referido al escrito que el presidente Rajoy ha enviado a la Audiencia Nacional pidiendo que su comparecencia como testigo en el juicio de la trama Gürtel se haga por videoconferencia y en torno al 26 de julio.
"Rajoy hace todo lo posible por disminuir el impacto que tiene para la democracia que el presidente del Gobierno acuda como testigo a un caso de corrupción --ha contestado--. Constatamos la casualidad entre comillas de la coincidencia de la fecha con la operación salida de muchos españoles, que casualmente tendrán menos información sobre lo que tenga que decir".
A su juicio, el presidente del PP coincide en su estrategia con Pujol, en referencia a que fue también en torno a un 25 de julio cuando el expresidente catalán reconoció que tenía dinero en Suiza. "Más allá de la barbaridad que supone que un presidente del Gobierno comparezca como testigo en un caso de corrupción, hay un problema que afecta a todos, a Pujol y al PP", ha añadido.
En ese sentido, ha relacionado la ausencia del Gobierno en el consorcio de la Fundación del Palau que debía decidir si acusaba a Convergència en el caso del 3% con la abstención del PDeCAT, heredero de CDC, que ha permitido convalidar el decreto ley de la estiba.
"Estamos ante una red inmensa de corrupción que opera como un compleja red de intereses comunes", ha resaltado, subrayando que la moción de censura presentada por Unidos Podemos es la receta para "recuperar la democracia y limpiar las instituciones".
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