Algún día echaremos la vista atrás y nos daremos cuenta de que lo que ha conseguido Zara no lo ha hecho antes ninguna marca de las que están fuera de la órbita del lujo. La enseña principal de Inditex no se perdió la gala de los Oscar que se celebró en la madrugada del domingo. Aunque no vistió a ninguno de los actores y actrices que desfilaron por una descafeinada alfombra roja, sí que puede decir que tiene el honor de haber vestido a más de 500 personas para la ceremonia.
Porque la marca española fue la encargada de vestir al personal que estaba entre bambalinas. Un backstage compuesto por 500 personas que se encargaron de que todo saliera a la perfección, tanto en lo que tiene que ver con el desarrollo de la gala como en el acomodo y trato a las estrellas de Hollywood.
Un hito que el gigante de Arteixo anunció a través de su Twitter, una de las pocas veces que Zara ha hecho este tipo de ‘publicidad’, pero la ocasión bien lo merecía: En ZARA nos emociona haber colaborado con la Academia para vestir al equipo del backstage de los #Oscars esta noche. ¡Esperamos que disfruten la ceremonia!
ZARA is excited to have collaborated with @TheAcademy to dress the team backstage at tonight's #Oscars. We hope you enjoy the ceremony!
— ZARA (@ZARA) 4 de marzo de 2018
De este modo, la enseña refuerza su estrategia en Estados Unidos, donde quiere ganar más visibilidad. Un esfuerzo que viene realizando en los últimos años y que en 2017 dejó patente al llevar a sus dos marcas más desenfadadas, Bershka y Stradivarius, a este país. Actualmente, Zara tiene 85 establecimientos en el suelo estadounidense de las 7.504 tiendas con las que cerró Inditex el tercer trimestre en un total de 94 mercados.
En concreto, de Zara tiene 2.127 establecimientos fuera de España, de los que 85 operan en Estados Unidos, según los últimos resultados presentados por la firma. Las ventas en América suponían en el ejercicio 2016 (los resultados de 2017 se conocerán en breve) el 15% del total, todavía lejos del 44% que supone Europa, de ahí la importancia de eventos como los Oscar para ganar visibilidad en este mercado, que es uno de los que tienen más potencial para Inditex.
Tres diseños elegantes para el backstage
No piensen que los diseños de Zara para el equipo de profesionales de los Oscar se limitaron a los típicos trajes o vestidos negros. La enseña fue más allá y vistió a todo el equipo femenino con trajes que bien podríamos ver colgados pronto de las perchas de sus tiendas, pues son de rabiosa tendencia.
En concreto, fueron tres los elegidos. El primero era un vestido en forma de blazer de smoking, largo y en color negro, un diseño sumamente elegante y con el que hace un guiño a una noche de tanto glamour.
El segundo era más femenino, compuesto por un vestido de satén largo sin mangas recogido a la cintura por un cinturón.
El último, también era de satén, pero en este caso era un mono con mangas francesas tipo túnica y un lazo en el escote.Tres diseños elegantes y sobrios para la noche más importante del cine americano. De momento, Zara ya ha puesto un pie en la meca del cine. ¿Veremos su ropa en la alfombra roja el año que viene?
La firma española que sí hemos visto desfilar este año por la alfombra roja ha sido la de Hannibal Laguna. ¿La culpable? La tenista ganadora de dos torneos de Grand Slam, Garbiñe Muguruza. Era una de las invitadas a esta 90 edición de los premios y fue de las primeras en pisar la alfombra roja del Dolby Theater de Los Ángeles. Lució un vestido negro de seda con escote en uve, de tirantes y con un cinturón de cristales y azabaches bordados.
La tenista, que está en Los Ángeles para disputar el torneo Indian Wells no dudó en hacerse otra foto junto al deportista estrella de la noche. Kobe Bryant, ganador de cinco anillos de la NBA, anoche subía a por su primer Oscar.
Y otro nombre español que desfiló por la pasarela de moda previa a los premios de cine fue el de Paz Vega, que este año se estrenaba además como académica. Para la ocasión no apostó por una firma española, sino que lo hizo por Christopher Bu. La actriz española lució un arriesgado vestido tubular con escote palabra de honor con estampado de flores rojas con reminiscencias orientales. El look lo completaba una capa de cuadros.
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