Los plazos fijados por fomento hacen muy difícil que los ave privados circulen en 2015


Los plazos establecidos por la orden del Ministerio de Fomento para llevar a cabo el proceso de concesión del título habilitante para operar trenes privados en el corredor Madrid-Levante hacen muy difícil que el proceso pueda estar concluido durante el año 2015, tal y como pretende el departamento dirigido por Ana Pastor.

De momento, la orden se encuentra en el proceso de información pública, el periodo en el que las empresas interesadas pueden presentar alegaciones, y su plazo vence el próximo 4 de diciembre.
Aunque depende del número de alegaciones presentadas, el plazo transcurrido entre el periodo de consultas y la publicación de la orden ministerial definitiva es habitualmente de unos dos meses, lo que supondría que la convocatoria del concurso podría arrancar en febrero.
Según la orden, que puede consultarse en la web del ministerio, el plazo previsto para que las empresas presenten sus ofertas es de tres meses y a continuación la mesa de contratación dispondrá de un máximo de otros dos meses para resolver el concurso.
Esto supone, que en el mejor de los escenarios, si la adjudicación se produce en pocos días, la selección de la empresa que operará estos trenes no se producirá hasta mediados de mayo aunque podría demorarse hasta julio.
Una vez ganado el concurso, el vencedor dispone de tres meses, prorrogables por otros tres, para presentar la documentación y demostrar que cumple lo comprometido en su oferta para que le sea concedido el título habilitante. En el peor de los escenarios, este proceso podría concluir ya en 2016.
Además, en el momento en que el adjudicatario obtenga este título, que tendrá vigencia de siete años, dispondrá de otro plazo, de un máximo de seis meses, para empezar a operar los trenes.
Con todo ello, según explicaron fuentes del sector a Servimedia, lo lógico es pensar que, como muy pronto, los trenes podrían estar circulando a finales de 2015 aunque lo más probable es que lo hagan a lo largo de 2016.
Preguntadas estas fuentes por lo recogido en la orden ministerial, lo consideraron razonable y destacaron que permite que se produzca un concurso público abierto aunque advirtieron que todavía hay muchas incógnitas que no se resolverán hasta la publicación de los pliegos del concurso.
Sin embargo, alertaron de que si Fomento no acepta que Adif rebaje los cánones que cobra por utilizar la red ferroviaria es imposible que se pueda ganar dinero con los trenes por lo que será muy difícil que se presente alguna empresa al concurso.
En concreto, las empresas que podrían participar en este proceso, entre las que están Veloi Rail (Familia Lara, Globalia o Acciona, piden que se revoque la subida del 35% de estos cánones aplicada en 2014 y que ha llevado a Renfe a sufrir pérdidas.
También piden conocer ya los precios a los que tendrán que alquilar los trenes a Renfe para poder realizar sus planes de negocio, puesto que la opción de comprar sus propios trenes es imposible al requerir unos tres años.
COMPROMISO MÍNIMO DE TRES AÑOS
Algunos aspectos recogidos en la orden de Fomento además de los plazos, son que se permitirá participar en el proceso a uniones temporales de empresas (UTE) en las que solo uno de los miembros cumpla los requisitos ferroviarios, siempre que cuente al menos con una participación del 20% en la sociedad.
En cuanto al concurso, establece que el plan de negocio tendrá una valoración de 55 puntos sobre un total de 100, el plan económico financiero una valoración de 35 puntos y otros factores como el número de años en los que el licitador se compromete a mantener la estructura del capital social de la sociedad, el plazo en que el licitador se compromete a mantener la ‘Oferta Base de Servicios Ferroviarios’ o determinados aspectos relacionados con las condiciones del servicio prestado valdrán otros 10 puntos.
Dentro de la oferta de servicios ferroviarios, los licitadores diferenciarán entre la ‘Oferta Base de Servicios Ferroviarios’, que será la oferta semanal de servicios que el operador se compromete a mantener durante todas las semanas del año, y el ‘Plan de Refuerzo de Servicios Ferroviarios’, que incluirá la previsión de servicios adicionales que ofertará en determinadas épocas del año, o en años sucesivos de vigencia del título, de acuerdo con su análisis de demanda.
Los operadores deberán mantener su oferta base durante al menos 3 años, aunque la podrán reducir un máximo del 10%. Para reducirla más deberán concurrir causas de fuerza mayor, ajustes en la disponibilidad de la infraestructura o razones de interés general.

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