El Ministerio para la Transición Ecológica anunció a finales del año pasado una propuesta para la actualización de la retribución del llamado Recore (renovables, cogeneración y residuos) que planteaba un recorte de 756 millones para 2023 y que dejaba sin primas a la eólica. El mismo día que la presentó, el 29 de diciembre, la Secretaría de Estado de Energía solicitó a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) el correspondiente informe a la orden ministerial, a efectos de su aplicación al semiperiodo regulatorio que comenzó el 1 de enero.
En concreto, el Gobierno calculó una retribución para las tecnologías del Recore de 5.138 millones de euros, lo que supone un 13% menos en comparación con 2022. El Ejecutivo se basó en un precio del mercado estimado para los años 2023, 2024 y 2025 de 207,88 euros el megavatio hora (MWh), 129,66 euros/MWh y 78,19 euros/MWh, respectivamente. Bajo este escenario de precios, Transición Ecológica suprimiría la retribución a la inversión y a la operación a las instalaciones eólicas, a las que el curso pasado se les asignó 583,5 millones. Además, se propone eliminar la retribución específica a las instalaciones de combustión de residuos, que en 2022 estaba fijada en 38,5 millones de euros.
En este contexto, el regulador destaca que cabría la posibilidad de incorporar las instalaciones que han pasado a tener una retribución nula, ante el escenario actual y previsto de elevados precios de mercado eléctrico, en el ámbito de aplicación del mecanismo de minoración del exceso de retribución que determinadas instalaciones perciben como consecuencia del funcionamiento marginalista del mercado mayorista, recogido en Real Decreto-ley 17/2021. "Todo ello, con el fin de asegurar la rentabilidad razonable que les garantiza la Ley 24/2013 (del Sector Eléctrico) a estas instalaciones", opina. Las plantas del Recore tienen una rentabilidad garantizada por su inversión del 7,1% y 7,4% para el conjunto de la vida regulatoria del proyecto. Cada planta se encuadra bajo una etiqueta de entre las miles de clasificaciones que define la norma, lo que se conoce como instalación tipo (IT).
Cálculo del 'pool'
El organismo que preside Cani Fernández también concluye que se podría adaptar la manera en la que se fijan los precios del mercado eléctrico para calcular la retribución. Según el artículo 22.1 del Real Decreto 413/2014, de 6 de junio, "la estimación del precio de mercado para cada año del semiperiodo regulatorio se calculará como la media aritmética de las cotizaciones de los contratos de futuros anuales correspondientes negociados en el mercado de futuros de electricidad organizado por OMIP desde el 1 de junio al 30 de noviembre del año anterior al inicio del semiperiodo para el que se estima el precio del mercado".
No obstante, el informe de Competencia resalta que durante el periodo comprendido entre el 1 de junio y el 30 de noviembre de 2022, las cotizaciones de los contratos de futuros no pudieron anticipar ni la coyuntura del mercado gasista ni la prórroga de la 'excepción ibérica'. Por ello, el regulador plantea la posibilidad adaptar el cálculo de forma "excepcional y puntual" con el fin de minimizar la diferencia entre los precios estimados para 2023 que se hizo a mediados del año pasado y las más recientes expectativas del mercado.
Asimismo, apunta que se podría tener en cuenta una revisión anual de los parámetros retributivos sin tener que esperar al final de cada semiperiodo, "dado el escenario de elevada volatilidad de precios vigente". El informe de la CNMC no es vinculante y lo presentado por el departamento que dirige Teresa Ribera tampoco deja de ser provisional, dado que el borrador puede sufrir cambios. Los valores del marco retributivo de las plantas sujetas al Recore se establecen cada tres años. Asimismo, el organismo aconseja reconsiderar el mantenimiento de los límites inferiores y superiores en torno al precio estimado del mercado una vez la ponderación de los mercados de futuros en la cesta de precios alcance el 75%.
Por otro lado, considera "necesario abordar a la mayor brevedad la metodología de actualización de la retribución a la operación de las instalaciones tipo cuyos costes de explotación dependan esencialmente del precio del combustible prevista en el artículo 5.9 del Real Decreto-ley 6/20220, de 29 de marzo". Con la actual propuesta de Transición Ecológica también se eliminaría la retribución específica a las instalaciones de combustión de residuos, que en 2022 estaba fijada en 38,5 millones de euros.
La retribución específica propuesta para 2023 a la tecnología de biomasa eléctrica se sitúa en 4,32 millones de euros (un 92,62% menos que en 2022), la de biogás en 9,2 millones de euros (-76,1%), la hidroeléctrica en 40.000 euros (frente a los 35,5 millones de 2022) y la que aprovecha las olas y la energía oceanotérmica en 140.000 euros (-72%). Para la tecnología solar fotovoltaica es de 2.087 millones de euros (-7,12% interanual) y de 948 millones de euros para la solar termoeléctrica (-9,9%).
Por el contrario, Transición Ecológica plantea elevar en 2023 la retribución específica de la cogeneración, hasta los 1.334,37 millones de euros (+5,2%), al tiempo que propone subir un 27,33% la retribución al tratamiento de purines, hasta los 443,11 millones de euros, y un 39,53% el tratamiento de lodos de aceite, hasta los 312,13 millones de euros. Para el cálculo de estos costes se han tomado como referencia los valores de potencia asignada a cada instalación tipo, utilizando como fuente el registro del régimen retributivo específico del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y los valores medios de producción de los años 2021 y 2022.
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