Comercio advierte que la Marca España la hacen las empresas, no los gobiernos

Madrid, 12 mar.- El secretario de Estado de Comercio y presidente del ICEX, Jaime García-Legaz, ha advertido hoy de que las empresas españolas "tienen que hacer sus deberes" para la internacionalización, ya que son ellas las que deben constituir la "Marca España", al margen del apoyo que puedan recibir del Gobierno.

Durante el XXI Foro Marca España, organizado por el Club Excelencia en Gestión, García Legaz ha subrayado que en Alemania o Francia, cuyos productos gozan de un reconocido prestigio internacional, no han sido los poderes públicos los que han hecho esa "marca", sino el "gran trabajo" de sus empresas.

Por ello ha pedido a las empresas españolas que hagan sus "deberes" en tareas como la formación en idiomas de sus empleados, una de sus principales carencias, ya que "el Gobierno tiene sus responsabilidades, pero las empresas también tienen las suyas".

Entre "deberes" que el Gobierno cumplimentará en los próximos meses ha citado la puesta en marcha de una ventanilla única con todos los instrumentos de financiación y de seguros al servicio de la internacionalización.

Así, ha admitido que las medianas y grandes empresas conocen perfectamente las herramientas públicas a su alcance, como el ICEX o el CESCE, pero el reto ahora es que las pymes tengan acceso fácil y unificado a estas ayudas.

En cuanto al caso de los jóvenes que deben salir al exterior por falta de empleo en España, el secretario de Estado ha defendido que "tiene sentido" que así lo hagan hasta que España pueda "volver a crecer con intensidad".

En la mesa redonda han participado también el presidente de Freixenet y del Foro de Marcas Renombradas Españolas, José Luis Bonet, el diplomático Inocencio Arias y la directora de la Cámara de Comercio de Canadá en España, Rose-Marie Losier.

Bonet ha considerado que si España quiere salir de la crisis "tiene que seguir el camino de la economía productiva con proyección internacional", una vez que "se ha hundido con estrépito el ladrillo especulativo".

A las empresas que van a salir al exterior les ha recomendado "ambición y determinación", y ha expresado "cierto optimismo" porque cada día "millones de productos" son disfrutados en el mundo, y ha abogado por utilizar los sesenta millones de turistas que cada año visitan el país como "gran escaparate".

Por su parte, Inocencio Arias ha recalcado que "con frecuencia" los exportadores comenten el error de no acudir a las embajadas de los países en los que inician una actividad.

También ha recomendado "no ser catetos" y aprender la lengua franca: el inglés.

Por su experiencia como embajador ante las Naciones Unidas, con sede en Nueva York, ha admitido que la Marca España es una idea "confusa y borrosa" basada en clichés, a excepción de productos aislados como Freixenet, Zara o Codorniú.

Rose-Marie Losier ha hablado por su parte de un "claro déficit" de comunicación y marketing de la marca "made in Spain", así como de falta de aprovechamiento en términos de imagen de España de los profesionales y estudiantes españoles el exterior.

Para el fomento de la exportación de las pymes ha defendido "cambios estructurales" en el modelo organizativo, ejecutivos más preparados e interculturales, y una relación empleador-empleado menos "paternalista" y desconfiada.