Elecciones 23J

¿Cómo se reparten los 350 diputados en cada provincia tras las elecciones generales?

Una vez conocidos los resultados de las elecciones generales de este domingo 23 de julio en España, el siguiente paso es formar el Congreso de los Diputados, que estará compuesto por 350 miembros en la próxima legislatura, y el Senado, con 265 escaños.  

¿Cómo se reparten los 350 diputados en cada circunscripción tras las elecciones generales?
¿Cómo se reparten los 350 diputados en cada circunscripción tras las elecciones generales?
Eduardo Parra / Europa Press

Los resultados de las elecciones generales que se han celebrado este domingo 23 de julio en España han revelado que PSOE y PP no han conseguido la mayoría suficiente de votos para poder gobernar de forma holgada. Mientras que la formación que lidera Alberto Núñez Feijóo ha conseguido 136 diputados, el partido de Pedro Sánchez ha logrado 122 escaños. De ahí que ahora los electores se pregunten cómo se reparten los 350 diputados en cada provincia española y, por ende, cómo quedarán conformadas las Cortes Generales, es decir, el Congreso y el Senado. 

Los expertos hicieron sus quinielas antes de que se llevaran a cabo estos comicios sobre el reparto de votos y escaños, teniendo en cuenta el funcionamiento del sistema electoral español, basado en el modelo de circunscripciones provinciales. El objetivo de este es que haya un reparto proporcional que evite que estén menos representadas las provincias menos pobladas, algo que se logra gracias a la conocida como Ley d’Hondt.

¿Cuántos diputados hay en el Congreso?

Los miembros del Congreso de los Diputados en España se escogen mediante un sistema de representación proporcional con listas cerradas en cada provincia. Este está formado por un total de 350 escaños de 52 circunscripciones, que se corresponden a las 50 provincias españolas, más las dos ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, de acuerdo con la ley electoral española.

Cada territorio parte de un mínimo de dos escaños, mientras que Ceuta y Melilla tienen uno cada una: así se asignan 102 escaños para el Congreso. Pero los 248 diputados restantes se completan de manera proporcional a la población de derecho.

¿Qué es y cómo funciona la Ley d'Hont?

El objetivo de evitar que las provincias menos pobladas estén menos representadas en el Congreso se consigue mediante la aplicación de la Ley d'Hont. El método fue creado por el jurista belga Víctor d’Hondt en 1878, y asigna los escaños a las listas de forma proporcional al número de votos recibidos en cada circunscripción.

A su vez, hay que tener en cuenta que en las provincias menos pobladas, los partidos necesitan menos votos para lograr un escaño. De acuerdo con esto, mientras que en Madrid se necesitan 122.222 votos para conseguir un diputado, en Teruel basta con 26.027. Los 3,81 millones de votantes de Madrid eligieron a 37 diputados, y los 79.427 votantes de Teruel eligieron a tres diputados. Esto supone que, en una provincia menos poblada, el valor del voto es mayor que en una muy poblada, lo que facilita que las primeras tengan más escaños de los que les correspondería por número de habitantes.

¿Cuántos escaños hay en el Senado?

Por su parte, el funcionamiento del Senado es diferente. Aunque coincide con la cámara baja en que ambas representan al pueblo español, como se establece en la Constitución, el Senado lo representa de forma territorial y el Congreso de manera conjunta. Los 265 senadores se eligen de dos formas: 208 en listas abiertas y el resto son designados por las comunidades autónomas.

Con respecto a la distribución del Senado, cada provincia debe seleccionar cuatro senadores, excepto en los archipiélagos y las ciudades autónomas, que eligen entre todas 18: Gran Canaria, Mallorca y Tenerife eligen tres cada una, Ceuta y Melilla eligen dos cada una, y a Ibiza-Formentera, Menorca, Fuerteventura, La Gomera, El Hierro, Lanzarote y La Palma les corresponde un senador. Los candidatos más votados en cada provincia son los que consiguen un sillón en la Cámara Alta. Por tanto, el sistema que se aplica pretende que haya una representación territorial equilibrada, al margen de la densidad de población.

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