Los consumidores de la eurozona encaran 2024 con algo más de optimismo que el año pasado, al menos en lo que a inflación se refiere. Tras situar el Banco Central Europeo (BCE) los tipos en máximos desde 2001, hasta el 4,1%, la percepción es que la inflación se va a colocar en el 3,2% en los próximos doce meses. Si bien la cifra es ligeramente superior al 2,9% en el que ha cerrado diciembre y supera las expectativas del propio banco central para este año (2,7%), suponen situar el avance de precios en niveles de 2022, tanto a un año como a tres años, por debajo de las tasas que se percibían en el pasado.
Según se desprende de la encuesta a los consumidores relativa a diciembre que elabora el organismo con sede en Fráncfort mediante la entrevista a unos 14.000 ciudadanos de Bélgica, Alemania, España, Francia, Italia y Holanda, la incertidumbre sobre las expectativas de inflación para el próximo año también han bajado ligeramente. En este contexto, una de las partidas que esperan que suba de precio es la vivienda, que prevén que costará un 1,2% más el próximo año, mientras que el acceso al crédito se abarataría tras marcar máximos en octubre.
En este sentido, las expectativas de los tipos de interés hipotecarios a doce meses han caído ligeramente hasta el 5,3%, una décima menos con respecto a la contabilizada en octubre, siendo los hogares con rentas más bajas los que esperaban tipos hipotecarios más elevados. La previsión va en línea con el sentimiento generalizado del mercado acerca de las tasas de referencia del dinero, para la que se proyectan rebajas este 2024.
A la espera de las actas del Banco Central Europeo (BCE), que se conocerán este jueves, casas de análisis como JP Morgan se muestran optimistas y aseguran, incluso, que este proceso puede arrancar en el tercer trimestre con dos o tres recortes de hasta 25 puntos básicos cada uno. Sin embargo, hasta que la Reserva Federal mueva ficha no prevén que Christine Lagarde dé un paso al frente en este sentido, pese a que el banco central estadounidense no contempla esta posibilidad hasta finales de año, por ahora.
La última encuesta de Bank of America realizada a los gestores arroja casi unanimidad en este sentido, ya que el 91% espera rebajas de tipos para 2024, aunque sigue pesando la probabilidad de entrada en recesión en Europa. En este sentido, los consumidores europeos contemplan unas pesimistas perspectivas económicas con una caída del 1,2%, pero son algo mejores con respecto al -1,3% que proyectaban en contraste con mercado laboral estable que, de momento, se mantiene mínimos del 6,4% en la región de la moneda única.
