La detección de Hepatitis A en fresas importadas de Marruecos ha reavivado las peticiones, tanto desde el ámbito político como dentro del sector primario, a favor de reforzar los controles en frontera a las importaciones de terceros países (no comunitarios). Lo sucedido con este producto ha colocado en primera línea al sistema de alertas alimentarias organizado alrededor del portal comunitario RASFF (Rapid Alert System Feed and Food, en inglés), en el que los países de la Unión Europea más Noruega e Islandia se hacen eco de todas las notificaciones referentes a riesgos derivados de los alimentos, los materiales con los que están en contacto o los piensos, que pueden suponer un problema para la salud animal o el medioambiente.
En esta base datos España es uno de los países más activos. En concreto, según los datos adelantados por la Comisión Europea (todavía el estudio anual para 2023 no ha sido publicado), registró durante el año pasado hasta 553 notificaciones de esta naturaleza (bien con origen en territorio nacional o haciéndose eco de avisos de otros países). En 2022, la cifra de avisos, según una búsqueda realizada por este medio, alcanzó los 324 casos. Esto supone un incremento superior al 58,6% entre ambos ejercicios. En 2021 fue de 524.
Muy por encima de España destaca la actividad de Alemania y Países Bajos que en 2023 realizaron hasta 1.764 y 907 notificaciones, respectivamente. El año pasado España se mantuvo en el top 10, en concreto, fue el sexto país con mayor número de avisos. Junto a alemanes y holandeses belgas (727), italianos (684) y búlgaros (567) nos superaron en advertencias. En el ejercicio anterior, según el 'Informe Anual de la Red de Alertas y Cooperación' correspondiente a 2022, Alemania se mantuvo como el país más activo con 586 notificaciones transmitida seguida por los holandeses con 559 avisos seguido por los belgas (428) y los polacos (320).
En este sentido, ejemplos como el de detección de Hepatitis A en fresas importadas de Marruecos en el que Bruselas ha dado libertad a España para tomar las medidas que crea necesarias y la localización de plagas como la 'mancha negra', en algunas partidas de naranjas provenientes de terceros países como Sudáfrica durante el año pasado, han puesto de actualidad al RASFF (Rapid Alert System Feed and Food). Este último caso obligó a la Unión Europea, tras las protestas de los citricultores valencianos, a imponer medidas adicionales como la refrigeración de las importaciones de naranjas con origen en esta nación africana.
En estes sentido, la "reorganización" de las inspecciones en frontera con el objetivo de mejorar la eficiacia de los controles a importaciones de terceros países es uno de los compromisos adquiridos por el ministro de Agricultura, Luis Planas, con las principales organizaciones agrarias (Asaja, COAG y UPA). Todo ello, en el contexto de las conversaciones que se vienen desarrollando en los últimos días para intentar fraguar en los próximos días un acuerdo definitivo para desactivar las movilizaciones en el campo.