El gran atasco de la TUR del gas impide el éxodo masivo al mercado regulado

Esperas infinitas por teléfono, correos sin respuesta, colas en las oficinas y hasta citas a varias semanas vista. El pánico energético ante el alto precio del gas que viene proclamándose desde hace meses como consecuencia del nuevo paradigma energético europeo ha hecho que muchos consumidores hayan optado por trasladarse a las tarifas de último recurso (TUR) de gas y luz (PVPC). Pese a que esta opción lleva años activa, no ha sido hasta después del verano cuando miles de españoles se han propuesto cambiar al sistema tarifario bonificado por el Gobierno que, al menos este invierno, garantizará unos precios más bajos que los del mercado liberalizado. 

Esta ola de adhesiones a las tarifas reguladas ha pillado por sorpresa a las comercializadoras reguladas, todas ellas dependientes de grandes grupos energéticos como Naturgy, Iberdrola, Endesa y TotalEnergies. Aunque ya venían observando cierto trasvase de clientes, alegan haberse visto "colapsadas" por no disponer de capacidad en sus servicios de atención al cliente que haga frente frente a semejante cantidad de peticiones. Sobre ellas tiene la vista puesta el Gobierno, que sospecha que están ralentizando estas peticiones para mantener a sus clientes en el mercado libre, donde los precios serán inevitablemente más altos. 

A finales de octubre se conocía que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) había abierto una investigación a las grandes compañías energéticas tras recibir quejas de los consumidores a la hora de trasladar sus tarifas al mercado regulado. Este ofrece "una tarifa más segura y menos volátil", según la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen. El Gobierno ha puesto en medidas para regular el impacto que los precios puedan tener sobre los bolsillos de los más vulnerables, limitando las subidas de precios en el mercado regulado y creando una nueva TUR para las calderas de las comunidades de vecinos. 

Menos del 1% del mercado libre se ha pasado al regulado

Las energéticas españolas tienen cerca de ocho millones de clientes dados de alta en el suministro de gas natural. Aunque de forma lenta, cada vez son más los ciudadanos que optan por pasarse a las tarifas del mercado regulado, dado que los precios ofertados -determinados por el Estado- son mucho más atractivos que los del mercado libre. Esta situación, que debería tener su reflejo en los datos de clientes de cada mercado, se observa muy tímidamente en las estadísticas por el gran atasco administrativo que acumulan las energéticas a la hora de tramitar los cambios que les piden sus clientes: el mercado regulado apenas ha crecido un 0,8% en los últimos ocho meses en favor del libre, que acoge al grueso de consumidores.

Según los últimos datos disponibles de la CNMC, correspondientes al mes de septiembre, casi 63.000 clientes se han incorporado al mercado regulado en lo que va de año. La gran mayoría de ellos, casi 40.000, lo han hecho durante los meses de agosto (11.089) y septiembre (28.406). Esta razón explica que el mercado libre haya perdido 50.243 clientes, salidas que se han intensificado desde el mes de mayo. En total, 6,4 millones de clientes permanecen en el mercado liberalizado frente a 1,6 millones que acumula el regulado, que permite acceder a esta tarifa de último recurso sobre los precios del gas.

Las energéticas se defienden

Naturgy es la comercializadora que gestiona la gran mayoría de esos 1,6 millones de clientes del mercado regulado. Concretamente, cuenta con casi el 75% de este mercado, y en consecuencia, ha sido la más afectada por esta avalancha de solicitudes. La energética catalana asegura que "está poniendo todos los medios" para atender el aumento de solicitudes, que cifran a una media de 22.000 tramitadas cada semana hasta un total de 85.000 desde septiembre. 

Desde la compañía recuerdan que esta cifra, de algo más de dos meses, supera a la gestionada en todo 2021, razón por la cual han incrementado el número de agentes telefónicos, lanzado un servicio de atención exclusiva para comunidades de vecinos y habilitado un canal digital para solicitar el cambio a su comercializadora regulada, Gas&Power.