Agencia Tributaria

Así obligará Hacienda a los autónomos a cotizar todo lo que deben

La Seguridad Social y Hacienda cruzarán datos para comprobar el rendimiento anual de cada autónomo y adaptar su cotización a sus ingresos a partir de 2024. Además, también regularizará la situación de quienes hayan cotizado de menos.

Así obligará Hacienda a los autónomos a cotizar todo lo que deben
Así obligará Hacienda a los autónomos a cotizar todo lo que deben
Europa Press

Desde el 1 de enero los trabajadores deben cotizar por sus ingresos netos y no según el tipo de cotización de que ellos elijan. Este cambio será paulatino hasta con un sistema de 15 tramos de cotización según los ingresos hasta que en 2025 se implante el sistema definitivo.

Hasta ahora, los autónomos podían escoger libremente su base de cotización independientemente de los ingresos y casi un 80% se decantaba por la base mínima. De hecho, por eso la pensión de los autónomos es más baja que la de los trabajadores por cuenta ajena.

Con la entrada en vigor del nuevo sistema, la Seguridad Social ha dado libertad a los autónomos para calcular cuáles serán ingresos netos y ajustar su cotización a uno de los 15 tramos. Y es que, una de las lagunas del sistema es que se basa en previsiones, no en el rendimiento neto real del autónomo mes a hemos.

Como era previsible, la mayoría no ha hecho el cambio, una parte por desconocimiento y otra por seguir manteniendo una cuota más baja y tener así más capital de forma temporal.

En concreto, apenas 400.000 autónomos han hecho su previsión de ingresos y ajustado su base de cotización, por los casi 3 millones que mantienen su cotización anterior a 2023.

¿Hasta cuándo se puede informar? Límite, 31 de octubre

El próximo 31 de octubre finaliza el plazo para ajustar la cuota de autónomo para lo que queda de año. El nuevo sistema permite a los autónomos cambiar su base de cotización cada dos meses con seis ventanas para ajustarla así a sus ingresos netos.

La ventana de octubre es la última para hacerlo y se aplicaría durante los dos últimos meses del ejercicio. El cambio se puede realizar a través de Importpass con el servicio de "Modificación de datos de trabajo autónomo".

Recuerda que el cambio no se aplicará de forma inmediata. Estos son los plazos clave:

  • 1 de marzo, si la solicitud se formula entre el 1 de enero y el último día natural del mes de febrero. Entraría en vigor en mayo.
  • 1 de mayo, si la solicitud se formula entre el 1 de marzo y el 30 de abril. Entraría en vigor en julio.
  • 1 de julio, si la solicitud se formula entre el 1 de mayo y el 30 de junio. Entraría en vigor en septiembre.
  • 1 de septiembre, si la solicitud se formula entre el 1 de julio y el 31 de agosto. Entraría en vigor en noviembre.
  • 1 de noviembre, si la solicitud se formula entre el 1 de septiembre y el 31 de octubre. Entraría en vigor en enero del año siguiente.
  • 1 de enero, si la solicitud se formula entre el 1 de noviembre y el 31 de diciembre. Entraría en vigor en marzo.

¿Qué pasa con quienes no hagan el cambio?

Los autónomos que prefieran mantener su cuota tendrán que regularizarla en 2024. En otras palabras, que la Seguridad Social les hará ingresar las cantidades a deber por la diferencia entre la base por la que han cotizado y por la que deberían haberlo hecho según sus rendimientos.

Para hacerlo, la Tesorería General de Seguridad Social (TGSS) cruzará datos con la Agencia Tributaria para poder determinar el rendimiento neto del autónomo. Según explican desde la revista de la Seguridad Social, el dato que usarán serán los rendimientos anuales del autónomo que conseguirán de forma automatizada una vez termine la campaña de la renta. Es decir, que se basarán en las cifras de IRPF para hacer el cálculo.

¿Cuándo regularizará la situación de los autónomos?

La Seguridad Social comunicará el resultado de la regularización a través de sus sistema de notificaciones telemática, ya que autónomos están obligados a recibir notificaciones y comunicaciones por medios electrónicos. Así nadie podrá decir que no recibió el aviso.

El proceso comenzará en el segundo semestre del año, ya que el organismo público necesita los datos de IRPF para hacer el cálculo.

Desde la Seguridad Social explican que se podrá aplazar el pago, igual que con cualquier otra deuda con el organismo.

Este procedimiento se repetirá para el ejercicio 2024, con una regularización de cuotas en el segundo semestre de 2025.

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