Guerra en la ciudad de los rascacielos

Los hoteles de Benidorm se lanzan contra los pisos turísticos y piden su prohibición

La patronal hotelera Hosbec los cataloga de "competencia desleal" y pide limitar su presencia a edificios completos mientras los propietarios de viviendas defienden su existencia, que permite "democratizar el turismo".

Numerosas personas toman el sol y se bañan en la playa de Poniente, a 11 de marzo de 2023, en Benidorm, Alicante, Comunidad Valenciana (España). Durante este fin de semana, la provincia de Alicante experimenta una subida de temperaturas de entre 8 y 10 grados centígrados, llegando a rondar una temperatura atípica para estas fechas de 30 grados centígrados. Las altas temperaturas casi veraniegas estarán acompañadas de fuertes rachas viento. 11 MARZO 2023;CALOR;CLIMA;CAMBIO CLIMÁTICO;ALTAS TEMPERATURAS;PLAYA;MAR;ARENA;TURISMO;MEDITERRÁNEO;MAR MEDITERRÁNEO;GORRO;GAFAS DE SOL;TOALLA;BIKINI;ORILLA;BAÑADOR;APARTAMENTOS PLAYA; Joaquín Reina / Europa Press 11/3/2023
Los hoteles de Benidorm se lanzan a por los pisos turísticos y piden su prohibición
Europa Press

La primera gran batalla turística del año ha llegado en plena Semana Santa. La patronal de los hoteles de Benidorm, Hosbec, ha planteado prohibir las viviendas turísticas en edificios residenciales, al considerar que afectan a la convivencia y provocan turismofobia. Esta afirmación ha tenido una rápida respuesta de la asociación de propietarios de este tipo de pisos, que ha criticado a Hosbec por confundir sus intereses con el del resto del sector turístico, y les ha recordado que "ya no son mayoría en la oferta alojativa". 

La declaración de guerra de los hoteles de la ciudad de los rascacielos tiene su explicación en el sustancial incremento de pisos turísticos de los últimos años, impulsados por el alza del turismo internacional. Sólo en 2022 crecieron un 8,1% respecto al dato de 2019, hasta un total de 3.750 establecimientos de este tipo repartidos por Benidorm. Con una capacidad aproximada de 17.200 plazas, registraron niveles de ocupación del 47,4%, según datos recogidos por la plataforma Airdna y publicados por Hosbec. 

Los hoteles piden prohibirlos

El presidente de los hoteles de Benidorm, Fede Fuster, encendió la mecha al proclamar que los pisos turísticos en residenciales generan "problemas cívicos de convivencia y turismofobia". Propone limitarlos a edificios que oferten este modelo residencial al completo, ya que "el uso de un edificio residencial no puede compartirse con el turístico". Además, aseguró que estos pisos ejercen una "competencia desleal muy preocupante". 

"Yo en un piso no puedo hacer un restaurante por el hecho de tener una cocina, ni puedo hacer un taller de bicis, ni puedo hacer una fábrica de ladrillos. Cada cosa tiene que tener su uso y su legislación, y entendemos que la vivienda de uso turístico debería estar directamente prohibida", aseguró. Fuster también comparó los gastos de estos alojamientos con los de los hoteles: "Se venden más baratos porque tienen mucho menor coste", criticó, mientras que los establecimientos hoteleros deben cumplir normativas con "un coste brutal".

Un portavoz de la asociación hotelera ha explicado a La Información que aunque no son contrarios a los pisos turísticos legales, creen que suponen "una amenaza para la sociedad", al generar efectos perversos sobre la oferta de vivienda residencial y  limitando las posibilidades de trabajar en la ciudad. Las quejas de los hoteleros de Benidorm se alinean con las reclamaciones de la patronal hotelera española, Exceltur, quien reclamó al Gobierno que fijara un marco legal estatal para los pisos turísticos que ordene un "crecimiento descontrolado" de los mismos.  

Los propietarios responden

La respuesta de los propietarios de pisos turísticos no tardó en llegar. Lo hizo a través de ApturCV, la entidad que agrupa los intereses de los pisos turísticos de toda la Comunidad Valenciana. Su presidente, Miguel Ángel Sotillos criticó las pretensiones de los hoteleros de concentrar la oferta de alojamientos y acusándoles de "confundir el interés del sector hotelero con el interés general de las empresas turísticas". 

Sotillos ha pedido a Fuster "que deje de alimentar el debate de la turismofobia y apoye la regulación de las viviendas turísticas legales", y recordó que los hoteleros "ya no son mayoría en la oferta alojativa", donde el alquiler vacacional supone más de la mitad de plazas disponibles. A su juicio, este ha permitido democratizar el turismo y cuenta con una demanda mayoritaria.

Los propietarios también cuestionan el "interés monopolístico de la patronal hotelera" y critican que la patronal esté buscando un veto a las viviendas turísticas mientras promueve la reconversión de hoteles pequeños y obsoletos a un modelo de 'hostel' que compita con las ofertas de plataformas tipo Airbnb.

Un negocio en auge por todo el litoral

Sólo en la Comunidad Valenciana hay más de 85.000 apartamentos y pisos turísticos registrados que ofrecen más de 250.000 plazas, según datos de ApturCV. Equivalen al 55% de la oferta de alojamiento de las tres provincias levantinas, y generan un impacto económico anual de 1.700 millones de euros.

La discusión sobre los pisos turísticos está siendo especialmente intensa en Valencia, donde el auge de las viviendas turísticas han llevado al ayuntamiento a promover su regulación en el casco histórico (distrito de Ciutat Vella), aunque parte de las limitaciones fueron tumbadas por los tribunales. La ciudad cuenta con 5.200 viviendas turísticas con 22.000 plazas disponibles que superan ampliamente la oferta hotelera. 

También ha entrado en este debate la Generalitat, que recientemente aprobó el marco regulatorio para la fijación de tasas turísticas en los municipios, que se podrán aplicar a discreción de cada localidad desde diciembre de este año. Quienes opten por pernoctar en un apartamento turístico deberán abonar precios de 1 y 1,5 euros por día, en función de que los pisos sean catalogados como de categoría superior o estándar. 

Mostrar comentarios