VDA, la patronal de los fabricantes de automóviles alemanes, ha señalado que son necesarias "reformas masivas" en la industria automovilística si Alemania quiere mantenerse como potencia mundial. Hildegard Müller, presidente de VDA, ha pedido medidas de apoyo para el sector.
Durante el IAA Mobility, el Salón del Automóvil celebrado en Munich, Müller ha expresado su preocupación por la situación del país, afirmando que está perdiendo "drásticamente la competitividad" debido a alza de precios, especialmente los de la energía, em comparación con los otros países con los que compite en el sector.
Para hacer frente a este incremento en los costes, la industria alemana del automóvil ha pedido al Gobierno que implemente una subvención estatal para suplir el precio de la electricidad de forma temporal, como medida para evitar que se continúen los procesos de deslocalización de los fabricantes de componentes utilizados en la industria automovilística, como baterías o semiconductores.
Desde VDA han señalado también otros factores que influyen el el deterioro del sector, como la lentitud a la hora de tomar decisiones relacionadas en política, la ausencia de normativa establecida para la regulación de cuestiones como la inteligencia artificial.
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