Si tu rutina mañanera comienza con un café en el bar y lo acompañas con el típico sobre de azúcar o eres de los que pide sobres de kétchup cuando va al McDonald's o Burger King, pues debes saber que no le que mucho tiempo a este tipo de embalajes. Las políticas de la Unión Europa luchan para acabar con la gran cantidad de plásticos y envases que se usan a diario en todos los países europeos en busca de mayor sostenibilidad.
En España, esta popularidad del café converge desde hace muchos años con el servicio de los bares. De manera casi normativa, miles de españoles se reúnen todos los días en las terrazas y mesas de estos locales ha disfrutar de una taza de café caliente preparada de la forma que más les guste. Algunos escogen el tradicional café con leche, mientras otros prefieren acompañarlo con un gran vaso de hielo. Sin embargo, la gran mayoría se rinde ante su amargo sabor y, para equilibrarlo, vierte un pequeño sobre de azúcar.
Pero puede que estos envases desaparezcan dentro de unos pocos años. La Unión Europea lleva muchos años poniendo en marcha reformas legislativas que impulsen el uso íntegro y sostenible de los envases de plástico, cartón y papel que utilizamos todos los días, lo que afecta directamente a bolsas de la compra, envoltorios de comida y en este caso, sobres de azúcar.
El organismo ha establecido algunos parámetros ecológicos nuevos. El diseño de los productos, por ejemplo, deben permitir una mayor duración y un reciclado de alta calidad. Además, deberán ser más reutilizables y de una forma más rentable, excluyendo así todos aquellos envoltorios que sean de un solo uso o no puedan ser utilizados de forma continuada por un tiempo medianamente aceptable.
¿Cuándo dejarán de utilizarse?
Así, los bares y restaurantes que utilizan ahora estos sobres y envoltorios poco respetuosos con el medio ambiente deben de comenzar a buscar un sustituto o alternativa, con el que seguir ofreciendo a los clientes productos como el azúcar, como pueden ser envases de plástico reutilizables de larga duración o botes de cristal puestos a disposición del consumidor.
El año 2030 es la fecha objetivo que ha estipulado la UE para valorar los resultados de todas las medidas climáticas que deben cumplir los ciudadanos europeos. Entre ellas, destacan unas cuantas regulaciones nuevas que van a reducir la presencia de materiales no reciclables en nuestros hábitos de consumo, y que tienen como objetivo reducir la emisión de gases de efecto invernadero en Europa.
