La factura media de electricidad para los hogares en el mercado regulado en el cuarto trimestre del año pasado se situó en 38,5 euros, lo que supone un 37% menos que los 61,3 euros que pagaron los clientes que tenían contratada una tarifa en el mercado libre, según datos del Panel de Hogares de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) publicados este viernes.
Asimismo, el recibo medio de la luz en el denominado Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) fue un 45% más barato con respecto al mismo periodo del ejercicio precedente, mientras que, por el contrario, en el caso del mercado libre se incrementó 21,4%. El consumo de los hogares en tarifa regulada alcanzó los 184,4 kilovatios hora (kWh) mensuales de media, cuando en el último cuarto de 2021 cifró en 246,9 kWh/mes. En el caso de los hogares en mercado libre, la demanda fue de 213,3 kWh/mes, cuando en el cuarto trimestre de 2021 alcanzó los 247,7 kWh/mes.
Por otro lado, Competencia constata que casi un 30% de los hogares tenía el mismo precio en todas las horas del día, un 18% con dos o tres tramos horarios y un 9,5% un precio distinto en cada hora. Además, casi uno de cada cuatro hogares no sabía qué tarifa eléctrica tenía contratada con su comercializadora. Teniendo en cuenta que según la tarifa contratada el precio de la luz puede variar en función de la hora o el tramo horario, tanto si se contrata en el mercado libre como en el regulado, un 38% de los hogares tuvo muy en cuenta su consumo en función de la hora.
Exceso de potencia contratada
Sin embargo, un 23% lo tuvo solo un poco en cuenta, y casi un 38% ni siquiera pensó qué hora era en el momento de realizar sus principales consumos de electricidad (como poner la lavadora, la calefacción o el aire acondicionado). Otro factor destacado en la factura de la luz es el término de potencia, que es el máximo de kilovatios que podemos consumir a la vez en el domicilio y por el que se paga un importe fijo. Desde junio de 2020, los consumidores pueden contratar potencias distintas según el tramo horario (punta: de 08.00 horas a 24.00 horas de lunes a viernes, y valle: de 24.00 horas a 08.00 horas de lunes a viernes, además de sábados, domingos y festivos nacionales). Así, a finales de 2022, un 2% de los hogares contrató una potencia diferente según el tramo horario, mientras que el 98% restante tenía la misma potencia en los dos tramos.
Una cuestión por la que los usuarios pagan más sin saberlo es por el exceso de potencia contratada. Según los datos de la CNMC, casi el 65% de los hogares tenía, en promedio, un 1,2 kW más de potencia contratada de la que realmente utilizaron en las horas punta. En la misma línea, el 63% tenían contratado un excedente de 1,4 kW en las horas valle.
La tarifa regulada actual fue introducida por la Ley del Sector Eléctrico de 2013 y se regula por Real Decreto 216/2014. Este tipo de tarifa solo puede contratarse con una de las ocho comercializadoras de referencia (COR) que hay en España: seis actúan en la península ibérica, Canarias y Baleares -y hay dos específicas para Ceuta y Melilla-. En concreto, son Energía XXI (Endesa), Curenergía (Iberdrola), Gas & Power (Naturgy), Baser COR (TotalEnergies), Régsiti (Repsol), CHC COR (CHC), Teramelcor (Gaselec Diversificación) y Energía Ceuta XXI (Endesa). Los clientes que quieran volver al mercado regulado solo tendrán que solicitarlo a una de las comercializadoras de referencia, aunque primero deben comprobar que no mantienen permanencia con su compañía.
La pregunta ahora está en qué mercado conviene estar, si en el regulado o el libre. Hay que subrayar que los datos publicados por Competencia corresponden a los últimos meses de 2022. Según su comparador, actualmente, para un hogar medio con una potencia contratada de 3,5 kilovatios (kW) y un consumo medio de 3.300 kilovatios hora (kWh), la tarifa regulada tiene un coste anual de 660,48 euros, mientras que la más barata en el mercado libre ronda los 646 euros.
Nueva tarifa regulada
A partir de 2024, será efectivo el nuevo PVPC con el fin de reducir la volatilidad en las facturas que provocan los cambios de los precios diarios de la electricidad. En concreto, la nueva tarifa regulada introducirá factores de corrección para que refleje en una muy buena parte el precio del mercado diario y también los precios más estables que ofrecen los mercados a futuro a tres meses y a un año. Incorporará así una cesta de precios a medio y largo plazo para evitar las fuertes oscilaciones, aunque sin perder las referencias de precios a corto plazo que fomentan el ahorro y el consumo eficiente.
Lo que se pretende así es reducir progresivamente la vinculación del PVPC al mercado diario y para ello se tendrán en cuenta los precios más estables que ofrecen los mercados a plazo del Mibel, donde se adquiere energía con antelación en distintos horizontes temporales futuros. Para ello, la oscilación de precios -la variación entre el registro máximo y el mínimo- se reduce un tercio, pasando del 27% al 17% durante la jornada diaria, y del 23% al 16% en la media mensual durante el año completo.
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