Rebajas de verano

El truco que te ayudará a ahorrar si crees que eres comprador compulsivo

Si no te puedes resistir a las ofertas, descuentos y rebajas, realizas compras rápidas por internet, o estás continuamente consumiendo y comprando artículos que luego no utilizas estás perjudicando tu independencia financiara y ahorros.  Este truco es muy sencillo de aplicar en el día a día y puede ayudar a evitar tomar estas decisiones.

El truco que te ayudará a ahorrar si crees que eres comprador compulsivo
El truco que te ayudará a ahorrar si crees que eres comprador compulsivo
garetsvisual a través de freepik

Hay veces que las ofertas nublan nuestro buen juicio a la hora de comprar y acabamos adquiriendo productos que tal vez no necesitemos, no lleguemos a darles uso y nos impidan cumplir con nuestros objetivos de ahorro. Los periodos de rebajas nos llevan, habitualmente, a gastar dinero de manera más descontrolada con la excusa de la bajada de los precios. 

Para evitar que una mala decisión de compra, tomada de manera impulsiva, afecte de manera negativa a nuestra salud financiera, podemos aplicar un truco no solo en estos periodos donde el consumo aumenta, casi inevitablemente; sino en nuestro día a día, sobre todo si tendemos a ser compradores compulsivos. 

El experto en finanzas y presentador del podcast My Millennial Money, Glen James, explica este sencillo gesto. Consiste en tomar como referencia nuestros ingresos anuales para calcular si deberíamos comprar o no aquel objeto o producto que deseamos de manera impulsiva. 

Esperar un día para hacer la compra

Tal y como explica James, cuando queramos comprar algo que supere en precio el 1% de nuestro salario bruto anual (o nuestros ingresos totales, si tenemos más fuentes de entrada de dinero), deberemos esperar un día para comprarlo. Parece una tontería, pero esta técnica nos ayudará a cortar con las malas decisiones de compra. 

Este periodo de 24 horas da al comprador la posibilidad de pensar sobre esta adquisición: ¿de verdad necesito eso que quiero comprar? ¿Cuánto voy a usarlo? Si al final descubrimos que es algo que verdaderamente necesitamos o queremos, adelante con la compra. Pero si descubrimos que la necesidad de comprarlo estaba basada en un acto impulsivo para obtener algo de satisfacción momentánea, el hecho de haber esperado un día nos ayudará a evitar gastar nuestro dinero de manera innecesaria y no meditada. 

James apunta que este porcentaje funciona si se ganan menos de 183.000 euros anuales y no se tienen deudas o si se tienen, los pagos son manejables y están controlados. Si por nuestro nivel de ingresos consideramos que un 1% es un porcentaje demasiado alto, este puede incluso reducirse. Al final, el truco está en meditar la decisión y no comprar de manera impulsiva.

Mostrar comentarios