Continúan los cambios en Twitter después de Elon Musk cambiara el nombre de la red social y eliminara al popular pájaro que ha representado a la marca para situar en su lugar una X. Ahora, el empresario ha rebautizado TweetDeck como XPro, un servicio que ya no es gratuito para todos aquellos que administraban varias cuentas con la popular herramienta.
El cambio se ha producido por sorpresa. Muchos de los usuarios de TweetDeck han descubierto el nuevo producto de Musk al intentar entrar en sus cuentas de la popular herramienta. En vez de acceder, han sido redirigidos a la página de ventas para X Premium donde han descubierto que si quieren seguir usando este servicio deberán abonar una cuota mensual.
TweetDeck era una herramienta muy usada por periodistas y especialistas en Márketing, puesto que permitía programas tuits, así como gestionar diferentes cuentas a la vez, todo bajo una misma interfaz. Al tratarse de una plataforma gratuita, se había convertido en la opción principal para muchos profesionales que ahora deberán hacer un desembolso si quieren seguir usándolo.
Cuánto cuesta XPro, el sustituto de TweetDeck
XPro contará con una suscripción mensual de 9,99 dólares (9,15 euros) y la anual asciende a 99,99 dólares (91,55 euros). Además, permiten una cuenta familiar de 19,99 dólares que permite el acceso de hasta cinco miembros de la familia para usar el nuevo TweetDeck.
El anuncio de la 'muerte' de TweetDeck ya se había realizado el pasado 3 julio. La compañía indicó que la herramienta pasaría a ser de pago en 30 días y, aunque han tardado un poco más de lo esperado, al final han cumplido con su promesa. Como justificación a esta decisión, desde la compañía ahora en propiedad de Elon Musk señalan que pretenden dar el mejor servicio para los usuarios y que los ingresos que reciban de las suscripciones al nuevo XPro servirán para mejorar sus funciones y características.
Sin embargo, las reacciones a este nuevo sistema de pago no han sido bien recibidas por los usuarios de TweetDeck. La mayoría se han sentido decepcionados por tener que hacer un desembolso mensual por usar una herramienta hasta ahora gratuita que, si bien tenía ciertas limitaciones, permitía un uso profesional de Twitter y mantener un control eficaz sobre las publicaciones realizadas en diferentes cuentas.
Con esta medida, Musk sigue adelante con sus planes de monetizar Twitter en todas sus versiones. El pago por la verificación de cuentas fue solo el primer paso de lo que estaba por llegar. Limitar el número de tuits que pueden visualizar la cuentas gratuitas y ahora el cambio en TweetDeck son un fiel reflejo de las intenciones del empresario tras la compra de la red social.
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