BBVA convoca a su junta general de accionistas para el próximo marzo en la que propondrá cambios en el consejo de administración con el nombramiento como consejeros de Enrique Casanueva Nárdiz y Cristina de Parias Halcón como independiente y externo, respectivamente. Según ha notificado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la entidad ha puesto en la mesa estos dos nombres en sustitución de José Maldonado Ramos y Juan Pi Llorens, por lo que de confirmarse elevará la presencia femenina hasta el 47% y mantendrá el porcentaje de independientes por encima del 65%.
Cristina de Parias Halcón es un rostro conocido dentro de la casa con más de dos décadas de experiencia en la compañía. La que fuera 'country manager' para España y Portugal entre 2014 y 2019, cargo del que fue cesada, así como BBVA Seguros, cuenta con una silla en BBVA México desde 2020, cargo que compatibiliza con el de independiente en otras empresas como Endesa y Sanitas. También es miembro del patronato de la Fundación Microfinanzas BBVA y de la Fundación Profesor Uría.
Enrique Casanueva, por su parte, procede de JP Morgan, donde ocupa el puesto de responsable de la firma estadounidense para Europa, Oriente Próximo y África. Anteriormente, desempeñó cargos de responsabilidad en el banco, siendo jefe de banca de inversión para España y Portugal y consejero delegado para la región. También tiene experiencia como banquero de inversión en Santander y Goldman Sachs.
El banco destaca el "profundo conocimiento y la dilatada experiencia en banca" de ambos perfiles al haber ocupado cargos ejecutivos de máxima responsabilidad en entidades financieras internacionales de mercados clave para la firma. BBVA prevé celebrar su junta de accionistas el próximo 14 de marzo en el Palacio Euskalduna de Bilbao en primera convocatoria. El 15 de marzo se realiza la segunda convocatoria. Está previsto someter a votación la reelección de José Miguel Andrés, Jaime Félix Caruana, Belén Garijo, Ana Cristina Peralta y Jan Paul Marie Francis.
En el orden del día también figura someter a votación la reducción del capital social por un importe máximo del 10% mediante la amortización de acciones propias. Este proceso se podrá ejecutar a través de una reducción total o parcial, así como en una o varias veces. En lo que respecta a la remuneración, prevén sacar adelante un nivel máximo de pago variable de hasta el 200% del componente fijo de la remuneración total para un determinado colectivo de empleados cuyas actividades profesionales "inciden de manera significativa en el perfil de riesgo" del banco.
