Pablo Hernández de Cos, gobernador del Banco de España, ha reconocido la difícil situación en que se encuentran las empresas españolas tras los primeros meses de azote de la crisis sanitaria. En este sentido, y de acuerdo con las simulaciones realizadas por el supervisor bancario, se espera una fuerte contracción de la rentabilidad de las empresas en el conjunto de 2020, lo que producirá que "más de la mitad" de las compañías cierren el ejercicio en pérdidas. De acuerdo con las palabras pronunciadas en el XI Encuentro del Sector Financiero organizado por KPMG y Expansión, esta situación será más desfavorable en el caso de las pymes, y especialmente en las compañías de las ramas de hostelería, restauración y ocio, vehículos de motor, comercio, y transporte y almacenamiento.
La situación con la que llegaron las empresas no financieras a esta crisis, con una reducción sustancial de sus niveles de endeudamiento y colchones de liquidez elevados, ha ayudado pero no ha evitado los problemas a los que ahora se enfrentarán. Las simulaciones realizadas por el Banco de España sobre la evolución de la liquidez de las empresas permiten también anticipar que el porcentaje de compañías con necesidades de liquidez desde el segundo hasta el cuarto trimestre de este año aumentaría como resultado de la pandemia casi 10 puntos porcentuales hasta situarse en el 70%, ha señalado Hernández de Cos.
Gracias a las medidas implementadas durante las primeras semanas de la pandemia, como la concesión de los créditos ICO, las empresas han podido hacer frente a estas necesidades. En este sentido, el gobernador ha señalado que la información sobre el crédito bancario evidencia que las empresas estarían recurriendo a esta fuente de financiación para cubrir una parte destacada de sus necesidades de liquidez. De hecho, de acuerdo con los datos del supervisor, el saldo del crédito de las sociedades no financieras con las entidades de crédito nacionales pasó de una contracción interanual del 1,1 % en febrero a una expansión interanual del 8,1 % en junio, si bien en julio y agosto este avance se moderó.
Como consecuencia de este hecho, la ratio de endeudamiento del sector en términos del PIB ha repuntado por primera vez desde 2010, llegando a situarse en el 82% en el segundo trimestre del año. Hernández de Cos considera que la intensidad de estos repuntes se corregirá en cierta medida cuando se incorporen los datos del PIB de los próximos trimestres, pero reconoce que las simulaciones realizadas por el Banco de España apuntan también a un deterioro de la situación patrimonial.
Para evitar que el endeudamiento de las compañías siga creciendo, el también presidente del Comité de Basilea ha señalado que tendría sentido modificar los instrumentos de apoyo a las empresas para evitar que el uso de estas políticas que han sido tan positivas impliquen un aumento de las obligaciones financieras para las empresas. Por ello, ha señalado que las ayudas directas o las inyecciones temporales de capital pueden resultar instrumentos más eficaces ahora para las empresas viables.
En paralelo, Hernández de Cos ha abogado por facilitar un funcionamiento más ágil de los procedimientos de reestructuración de las deudas para estas empresas viables que se enfrentan a dificultades para hacer frente a sus obligaciones financieras. Para ello, ha señalado la posibilidad de realizar mejoras en el funcionamiento de los procedimientos judiciales y extrajudiciales de insolvencias que lleven a una mayor eficiencia y agilidad.
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