Las cuentas del grupo de telecomunicaciones sueco Ericsson pincharon el año pasado, cuando registró una pérdida neta de 35.100 millones de coronas suecas (3.589 millones de euros). La compañía atribuye este resultado a la pérdida de valor de sus activos y a los ajustes que ha tenido que acometer en sus proyectos para clientes.
Solo un año antes, Ericcson había obtenido un beneficio de 1.900 millones de coronas suecas (194 millones de euros). Hace dos semanas el grupo anunció depreciaciones por 1.444 millones de euros, vinculadas al "goodwill" (fondo de comercio), que han sido incluidas en el balance del cuarto trimestre.
El resultado operativo anual pasó de un beneficio de 644 millones de euros a una pérdida de 3.895 millones. A lo largo del último año la compañía también vio resentirse sus ventas que descendieron un 10% hasta los 20.581 millones de euros.
En el cuarto trimestre la pérdida neta ascendió a 1.932 millones influida también por el descenso de las ventas y por gastos operativos más altos de lo esperado.
Ericsson presentó un resultado operativo negativo de 2.024 millones de euros, cuando un año antes la pérdida había sido de 31 millones de euros. Las ventas netas cayeron un 12% hasta 5.848 millones de euros.
El grupo sueco, que atraviesa problemas económicos en los últimos años, anunció hoy también la creación de una compañía independiente con la sociedad de capital de riesgo One Equity Partners para gestionar algunas áreas de negocio de su filial Media Solutions.
Ericsson poseerá el 49% de la nueva firma, en una operación que se espera esté cerrada en el tercer trimestre y de la que no se han facilitado más datos. Las acciones del grupo sueco han llegado a caer un 7,5% en la Bolsa de Estocolmo minutos después de la apertura de la sesión de hoy.
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