Es el momento de rebajar la presión de los inversores sobre la acción de Inditex y su presidente, Pablo Isla, la ha aprovechado para recalcar que la compañía dueña de Zara sigue su hoja de ruta y que nada ha cambiado en los últimos meses, a pesar de las recientes dudas de algunos grandes inversores, lo que ha presionado a la baja a su acción durante los últimos meses. "Tenemos significativas oportunidades de crecimiento global", ha señalado durante la presentación de resultados semestrales a los inversores.
Un avance que, sobre todo, va a venir marcado por la integración de los negocios físico y online. Isla sigue así sin desvelar si Inditex tiene previsto tirar, en el corto o medio plazo, de la millonaria hucha que atesora la compañía. Inditex prácticamente no tiene deuda financiera (40 millones al cierre del semestre), mientas que guarda, como caja neta, 5.944 millones de euros.
Isla ha asumido que la empresa gallega ha cerrado un semestre con un crecimiento menor al de otros ejercicios (sus ventas y resultado sólo han repuntado un 3%) pero en "un entorno muy demandante", afectada por la evolución de los tipos de cambio.
El máximo directivo de Inditex también confía en que la segunda mitad del año fiscal permita un crecimiento más elevado. Ahí hay varios porqués. Por un lado, por la positiva percepción por parte de los clientes de la nueva colección otoño-invierno, que está permitiendo un avance de las ventas comparables (las que consigue en las tiendas abiertas desde hace más de un año) de entre un 4% y un 6%, porcentajes que espera mantener de aquí al 31 de enero de 2019, cuando finalice el ejercicio. Por otro, porque el segundo semestre concentra más aperturas, mientras el primero se focaliza más en las absorciones de locales.
El foco, en el 'online'
Inditex ha cambiado el paso en los últimos años con sus tiendas: apuesta por locales cada vez más grandes y cierra los pequeños. En este sentido ha puesto el ejemplo de Bilbao, donde acaba de cerrar cuatro establecimientos en el centro de la ciudad y ha abierto un nuevo 'flagship' (tienda emblema) en la Gran Vía. Este último local suma más espacio comercial que los anteriores juntos.
En cuanto a la integración de las tiendas físicas y la digital, esa es la gran apuesta. Isla ha indicado que Zara es la cadena que tiene más avanzada esta unión de conceptos y de 'stocks', que será completa en todas las cadenas de Inditex en el año 2020, cuando venda online en todo el mundo. "Las tiendas tienen una capacidad limitada de 'stock', enviamos colecciones dos veces a la semana y la capacidad de tener prendas es limitada. En internet esa limitación no existe", ha resumido.
En cuanto a las cadenas, Isla ha apuntado que todas las enseñas del grupo mantienen el crecimiento de sus ventas comparables, al menos, en el citado 4%. En este sentido, ha indicado la positiva evolución de dos de las marcas más jóvenes de la multinacional, como Pull & Bear y Oysho. De esta última, sobre todo, por el despegue de sus colecciones deportivas, con las que ha dejado de enfocarse, exclusivamente, en la lencería.
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