15.000 millones en juego

La fuga masiva de banqueros de UBS amenaza su integración en Singular

Javier Marín ha movido ficha para controlar, a través de dos financieros de su total confianza, las salidas de profesionales que sufre la entidad suiza desde el anuncio de la integración.

Javier Marín, CEO de Singular Bank
Javier Marín, CEO de Singular Bank
Europa Press

El consejero delegado de Singular Bank, Javier Marín, ha encargado a dos financieros de su máxima confianza vigilar de cerca la fuga de banqueros que sufre el negocio de banca privada de UBS, que gestiona un patrimonio de 15.000 millones de euros, a raíz del anuncio de su adquisición por parte de Singular el pasado octubre, según fuentes financieras consultadas por La Información. El exCEO de Santander ha movido ficha cuando la integración todavía no se ha cerrado, a la espera de obtener el visto bueno de varios organismos reguladores y a la vista de que el goteo de salidas de los profesionales de UBS podría hacer descarrilar la operación, al menos, en los términos previamente acordados. 

El mercado prevé que el cierre del acuerdo de compra se dilate hasta este verano, pues la complejidad de la operación exige el dictamen de las autoridades regulatorias de varios estados. En la entidad que dirige Marín han empezado a mirar con lupa los plazos, al entender que los próximos meses serán cruciales para blindar la operación en las condiciones pactadas, dado que este tiempo deja margen suficiente como para agudizar la 'diáspora' de financieros que se está produciendo en la sucursal de UBS. 

Con este calendario sobre la mesa, Javier Marín se ha movilizado para situar a dos financieros de su máxima confianza en las oficinas madrileñas del banco suizo, en el número 4 de la calle María de Molina. Se trata de Gonzalo Algorri y Sofía Rivero. El primero ha sido el director Comercial y de Expansión de Singular Bank desde 2019 y el 'hombre clave' del área de Negocio del banco hasta hace apenas unos días, cuando se ha incorporado a la plantilla de la entidad suiza con carácter inmediato. Un trasvase que tanto Singular como UBS se han resistido a comunicar oficialmente.

La relación entre Marín y Algorri se extiende desde años atrás. El CEO de Singular Bank fichó al directivo procedente de Santander Private Banking, antes Banif, división que supuso el salto de la entidad que preside Ana Botín al negocio de banca privada, un proceso que fue capitaneado por el mismo Marín, años antes de su ascenso a consejero delegado de Banco Santander. Sofía Rivero ha aterrizado recientemente en UBS también procedente del área de banca privada de Santander, donde llegó a ser presidenta y consejera de varias sicavs y acumuló una larga trayectoria, incluyendo los años en que Marín estuvo al frente de esta división, entre 2013 y 2014. La incorporación es tan reciente que aún no se ha hecho pública en el entorno de UBS.

Singular Bank podría replantearse el precio acordado para la adquisición del negocio de banca privada de UBS de confirmar que la fuga de banqueros no se limita a casos aislados 

A partir de ahora, tanto Algorri como Rivero tendrán visión directa sobre lo que ocurre en las oficinas de la entidad suiza en un momento decisivo para la operación. Según las fuentes consultadas, UBS dejó a su cúpula de banca privada en España en un segundo plano en sus negociaciones con Singular Bank. Desde que se anunció la operación el pasado otoño, varios financieros de la entidad suiza han abandonado la entidad para integrarse en otras firmas de mayor peso internacional, algo que el mercado achaca al diferente perfil que se asocia a ambos grupos. Una de las salidas más sonadas ha sido la de José María Gil de Santivañes, quien este enero se incorporó a Credit Suisse, tras fidelizar a una de las carteras de clientes más potentes de UBS en nuestro país a lo largo de sus años vinculado a la entidad. 

Por razones de competencia, Singular Bank no puede acceder a la última hora de lo que ocurre en las oficinas de UBS, al menos, hasta el cierre definitivo de la operación, con la que Singular  prevé disparar el patrimonio bajo se gestión a alrededor de 20.000 millones de euros. Los rumores de una fuga de banqueros resuena en todos los corrillos del sector, un escenario que ha empujado a Javier Marín a tomar medidas. De confirmar que las salidas no son casos aislados, Singular podría replantearse el precio acordado para la adquisición del negocio de banca privada de UBS, que el mercado cifra en alrededor de 200 millones, a pesar de que ninguna de las dos entidades ha dado detalles al respecto. 

En el negocio de banca privada, es común que cada banquero arrastre tantas cuentas consigo como clientes fidelizados haya conseguido en el momento de un trasvase a otra entidad. Fuentes cercanas a la operación aseguran que una parte importante de los clientes de UBS están ligados a la propia firma más que a sus financieros. Pero el sello de la entidad suiza desaparecerá con la fusión, lo que ha llevado a Singular Bank a una contrarreloj para retener las cuentas de UBS tras la integración, motivo por el que el banco español ha realizado una ronda de llamadas con todos los clientes de la división recién adquirida, de cara a vender las bondades de la fusión. 

Singular Bank también ha lanzado toda su artillería para retener a los banqueros de UBS, a los que ha ofrecido condiciones económicas muy ventajosas, según ha podido saber este medio. Con todo, varias fuentes financieras próximas a la entidad suiza insisten en que, la plantilla de cerca de 70 profesionales de banca privada de UBS en España se ha recortado en varias decenas en los últimos meses. Estas apuntan a que muchos de estos financieros están esperando a que UBS reparta la retribución variable ligada a las cuentas de 2021 para levantar el vuelo. El pago del bonus está previsto para este mes de febrero.

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