Y finalmente llegó el pacto con la plantilla española. Telefónica acuerda un alza salarial de hasta el 7,8% para el año 2023, que incluye tanto el incremento correspondiente al presente ejercicio como la compensación por la pérdida de poder adquisitivo de los anteriores. Esta medida afecta a más de 16.000 empleados bajo el convenio de las tres principales filiales con las que opera en el país. Esto supondrá un esfuerzo económico relevante para el grupo de más de cien millones de euros en gastos de personal.
La clave de esta subida hay que encontrarla en la cláusula de revisión salarial que está incluida en ese convenio colectivo. Se establecía que en 2023 había que hacer cálculos para compensar la pérdida de poder adquisitivo durante la vigencia. En los dos primeros años apenas hubo problemas. Las diferencias llegaron sobre todo en 2021 y en 2022. Este último se cerró con un incremento del 5,7%. Ambas partes han pactado que todos los empleados cobren un 6,3% más. Esta es una medida para todos.
A esto hay que sumar la subida de la masa salarial teórica global correspondiente al ejercicio 2023. En concreto, según explican desde el sindicato CCOO, la mejora de ese 2023 se divide en dos: un 0,8% directo y para toda la plantilla y un 0,7% para los empleados que se aprovechan de bienios y de saltos de nivel salarial (que se conoce en el argot como 'deslizamientos') que se producen cada dos y ocho años, respectivamente.
Por esa razón, la subida directa para toda la plantilla es del 7,1% y de hasta el 7,8% para los que estén en esos dos supuestos de bienios o saltos de nivel. "Las plantillas de Telefónica de España, Telefónica Móviles y Telefónica Soluciones han aumentado su poder adquisitivo por encima del coste de la vida en el conjunto de los cuatro ejercicios”, afirma UGT.
Esfuerzo de más de 100 millones
La masa salarial de la empresa se incrementará un 7,8% de cara al año 2023, en línea con lo que preveían los sindicatos. La compañía no ha querido facilitar el dato de esfuerzo económico a la representación sindical durante la reunión que ha tenido lugar hoy en la Comisión de Interpretación y Vigilancia de Empresas Vinculadas. Lo que está claro es que supondrá un desembolso de más de cien millones de euros que se compensará en parte con la importante subida de precios que ha llevado a cabo en los paquetes convergentes de MiMovistar desde este mes de enero.
El caso español es el más paradigmático, pero no es el único flanco que debe cubrir la teleco. En Alemania, la subida en 2022 fue del 3,4% para todos los empleados, junto con algunas ayudas particulares. La negociación "está pendiente para 2023 y esperamos un resultado razonable", apunta Vilá. En Reino Unido, el pasado ejercicio elevó un 3%. En Brasil y Latinoamérica, "el objetivo es estar en línea con la inflación o ligeramente por debajo".
Por otra parte, se ha constituido la mesa de negociación para dotar a todas las unidades de negocio globales (GBUs en su argot interno) que están al margen del convenio general de las tres grandes filiales de un convenio de grupo que unifique las condiciones laborales de todas las sociedades que se engloban en esta denominación. Entre ellas está la holding Telefónica SA, la división digital o la de I+D.
Desde los sindicatos se reclama que en este colectivo, que representa varios miles de empleados en España, se produzca una subida salarial similar a la que se está dando para los 16.000 del convenio de las tres principales filiales. La negociación entre las partes aún continúa. Este incremento debería afrontarse por parte de la operador a partir del mes de marzo.
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