AI y otras ONG exigen que el Tratado de Comercio de Armas incluya la munición

  • Amnistía Internacional (AI), Fundació per la Pau e Intermón Oxfan han urgido hoy a las cinco estados permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU a acordar un Tratado de Comercio de Armas (TCA) que incluya las municiones e impida las exportaciones cuando sean un riesgo para los derechos humanos.

Madrid, 19 mar.- Amnistía Internacional (AI), Fundació per la Pau e Intermón Oxfan han urgido hoy a las cinco estados permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU a acordar un Tratado de Comercio de Armas (TCA) que incluya las municiones e impida las exportaciones cuando sean un riesgo para los derechos humanos.

En la plaza del Callao de Madrid, varios activistas de estas organizaciones se han disfrazado con caretas de los presidentes de EEUU, Barack Obama; Rusia, Vladimir Putin; Francia, François Hollande; China, Xi Jinping, y el primer ministro británico, David Cameron;

Además, estaban las figuras de la canciller alemana, Angela Merkel, y del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy.

Otros les apuntaban con el dedo índice de unas manos de plástico, con un montón de fusiles, pistolas y granadas de juguete a los pies para pedir a los líderes mundiales que aprueben este mes en la ONU, donde se está debatiendo, un TCA que salve vidas.

"La atención se centra en Estados Unidos, el mayor comerciante de armas del mundo (30 % de todas las exportaciones), país que está intentando debilitar el texto de proyecto del TCA pidiendo que no se incluyan en su ámbito de aplicación determinados tipos de armas y municiones", según un comunicado conjunto.

Pero todos los miembros permanentes del Consejo de Seguridad tienen una "responsabilidad especial" para conseguir un tratado "fuerte y vinculante" por ser responsables de la mitad del comercio mundial, que AI calcula en 100.000 millones de dólares.

Al Ejecutivo español se reclama que mantenga el mimo apoyo a un tratado de tales características y continúe promoviendo activamente su aprobación.

Jaime Atienza, de Intermón Oxfam, ha lamentado que las negociaciones se paralizaran en julio pasado y que una persona muera cada minuto por arma de fuego en el mundo; ha denunciado la "opacidad completa" de la venta de armas, pues sólo uno de cada ocho gobiernos informa de qué material vende y a quién.

Los conflictos que viven Siria, Mali o Sudán son ejemplos claros de este comercio sin control, según las organizaciones.

"El mundo no puede esperar más", ha enfatizado el presidente de FundiPau, Xavier Masllorens, mientras que el director de AI en España, Esteban Beltrán, ha pedido a las potencias que no compitan entre ellas por vender armas, sino por un tratado riguroso.

Han reclamado que se regule todo tipo de armas y municiones, el material asociado, las piezas y la tecnología, tanto el comercio internacional como las donaciones de armamento y los servicios de intermediación, transporte y financiación, con informes anuales públicos.

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