(ampliación) 22-m. El psoe confía en la decantación de los indecisos para dar la vuelta a las encuestas

La dirección del PSOE confía en la progresiva decantación de los indecisos para recelar de las encuestas que auguran su derrota en las elecciones autonómicas y municipales del próximo día 22 y obtener un buen resultado.
El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, compareció en rueda de prensa pocas horas antes de que se inicie oficialmente la campaña electoral para dejar claro que el partido está “en buena pista de despegue” ante esos comicios.
El hecho de que no sólo presenten más listas que nunca antes sino más que ningún otro partido, es “una señal de fortaleza”, aseguró, y también “un antídoto contra el pesimismo”.
Con ese espíritu combatió los resultados del barómetro preelectoral del CIS, según el cual el PSOE podría perder los gobiernos de Castilla-La Mancha, Baleares, e incluso Extremadura, donde dependería de un pacto con Izquierda Unida.
Blanco apeló a los últimos datos de la EPA, ante los que Mariano Rajoy “tuerce el gesto”, para subrayar que el PSOE gobierna en las tres comunidades donde más ha mejorado el empleo, País Vasco, Extremadura y Castilla-La Mancha, y aventuró que en esas dos los socialistas seguirán gobernando tras el 22-M.
En Extremadura, precisó, la encuesta indica que el PSOE “gana” las elecciones y podría mantener el Gobierno en solitario o con Izquierda Unida, y en Castilla-La Mancha hay una diferencia de trece puntos entre quieres prefieren a José María Barreda y quienes quieren a Dolores de Cospedal, y eso “tiene que traducirse en votos”, argumentó Blanco.
Sin querer “ensalzar ni desacreditar” ninguna encuesta en función de su resultado, Blanco insistió en que las encuestas son “una foto fija” del momento en el que se pregunta a los ciudadanos, que en este caso fue hace semanas.
El trabajo de campo empezó en marzo, subrayó, y los sociólogos coinciden en que durante el mes de abril se ha constatado una progresiva movilización de los indecisos, de quienes tienen claro que irán a votar pero no expresan el sentido de su voto.
Ese electorado, que Blanco diferenció de los abstencionistas, es en su mayor parte proclive al PSOE, aseguró, y por ello los socialistas confían en que siga esa tendencia y esa movilización consiga al final invertir la tendencia que reflejan las encuestas.
"EN BUENA PISTA DE DESPEGUE"
Recordó además que el PSOE “suele” obtener en las urnas mejor resultado de que antes le auguran las encuestas, y con todo ello concluyó que el partido está “en buena pista de despegue” para afrontar la campaña electoral.
Su mensaje será “de futuro”, algo que “nadie” puede defender en el PP, sentenció, porque sus dirigentes “se han quedado sin mensaje”. Su estrategia electoral, según Blanco, consistía en culpar de todo a Rodríguez Zapatero, pero ahora, irónicamente, “por culpa de Zapatero se han quedado sin mensaje electoral”.
Eso no quiere decir que el PSOE haya mejorado sus expectativas por la anunciada marcha del presidente en un activo, precisó, porque Rodríguez Zapatero sigue siendo “el activo más importante” del partido y todos los candidatos pueden declararse “orgullosos” de sus políticas.
CUALQUIER RESULTADO "SERÁ BUENO"
Frente a esa campaña de futuro, los socialistas señalarán a un Mariano Rajoy que quiere que los candidatos del PP “ganen por él lo que nunca ha sabido ganar por sí mismo” cuando ha concurrido como candidato frente a Rodríguez Zapatero.
En cualquier caso, bromeó, las expectativas son “tan bajas” que cualquier resultado que obtenga el PSOE en las elecciones “será bueno”. Ya con tono más serio, Blanco reiteró que la única batalla perdida es “la que no se da”, y los socialistas van a darlas “todas”.
El PSOE centrará su campaña en la idea de que estas elecciones son “decisivas” para consolidar la recuperación económica preservando las políticas sociales, y frente a ello intentarán visualizar las “barreras” que trata de interponer el PP a esa recuperación, a las políticas sociales, y al propio debate entre candidatos.
Como prueba de ello, Blanco señaló “el ataque” del PP a TVE, a la que el propio Mariano Rajoy pretende “acosar” para “amedrentar” a los periodistas.
Un partido que quiere “amordazar” a los periodistas es un partido que busca, en último término, “reprimir las libertades de todos los ciudadanos”, denunció Blanco, que se adhirió expresamente a la campaña difundida en las redes sociales para que no haya cobertura de las convocatorias en las que no se acepten preguntas.
Blanco aseguró que en el PSOE “jamás” se convocará a los periodistas para que hagan “de figurantes” sin poder preguntar al compareciente, y pidió al PP que asuma el mismo compromiso.
Sin embargo, Blanco dejó claro que hablaba sólo en nombre del PSOE, en cuya sede se encontraba, y no en nombre del Gobierno, por lo que no asumió la defensa de ese mismo compromiso entre sus compañeros de Gabinete.
Blanco presentó públicamente algunos de los vídeos que el PSOE difundirá durante la campaña, en los que defienden que estas elecciones no son para cambiar “el mundo” pero sí el entorno de cada elector con políticas que afectan a su vida cotidiana como el transporte público o las listas de espera para atención sanitaria.
El vídeo de Castilla-La Mancha compara las prestaciones públicas con las de Madrid para sentenciar “que no nos lo cambien”, y el de Madrid ironiza con las ventas de la “condesa Aguirre” en forma de subasta del agua, de hospitales y colegios y con el mensaje “aún estamos a tiempo de evitar el expolio” y defender lo público.