(ampliación) la audiencia nacional envía a prisión a díez usabiaga para que cumpla condena

La Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha ordenado el ingreso en prisión del exsecretario general del sindicato abertzale LAB Rafael Díez Usabiaga para que cumpla la condenada a diez años de prisión que le ha sido impuesta como responsable de un delito de integración en organización terrorista en grado de dirigentes por haber intentado reconstruir la ilegalizada Batasuna a las órdenes de ETA.
Los magistrados de la Sección Cuarta de lo Penal, presididos por Ángela Murillo, han decidido enviar a Díez Usabiaga a prisión preventiva a la espera de que el Tribunal Supremo se pronuncie sobre su condena al entender que existe riesgo de que el exlíder sindical se fugue si queda en libertad. El auto de prisión dictado hoy especifica que, de acuerdo a la jurisprudencia y si el Supremo no se pronuncia antes, Díez Usabiaga sólo podrá permanecer en la cárcel cuatro años y medio, un cómputo que corresponde a la mitad de la pena impuesta menos los seis meses que estuvo preventivo.
El tribunal ha valorado también el riesgo de que el condenado vuelva a delinquir sino ingresa en prisión. El exsecretario general del sindicato LAB fue excarcelado por el juez Baltasar Garzón en abril de 2010 bajo fianza de 30.000 euros para que cuidara de su madre, en situación de dependencia. El tribunal señala a este respecto que “la madre del acusado no precisa de la imprescindible ayuda de éste y puede ser atendida por otros familiares y allegados”.
La orden de ingreso en prisión fue notificada a Díez Usabiaga en la misma Audiencia Nacional. El antiguo dirigente de LAB salió escoltado por la policía y será trasladado hoy mismo a un centro penitenciario, probablemente al que se encuentra en Soto del Real (Madrid).
RIESGO DE FUGA
El auto dictado por la Sección Cuarta de lo Penal, del que ha sido ponente el magistrado Juan Francisco Martel, destaca “la gravedad de los hechos perpetrados” y “la elevada penalidad que se ha impuesto al acusado”.
El tribunal también señala que el ingreso en prisión de Díez Usabiaga es necesario “para prevenir el aumento del riesgo cierto de fuga y de repetición de actos como los enjuiciados” y subraya que el exlíder sindical, “aunque goza de arraigo personal y familiar, ha demostrado su capacidad de relación con personas y organizaciones que pudieran facilitar que aprovechara para no quedar sometido a la acción de los órganos judiciales”.
El fiscal encargado del “caso Bateragune”, Vicente González Mota, recordó durante la vista celebrada esta mañana que los otros cuatro condenados, entre ellos el exportavoz de Batasuna Arnaldo Otegi, se encuentran ya en prisión.
PETICIÓN DE LIBERTAD
Díez Usabiaga tomó la palabra al final de la vistilla celebrada por la Sección Cuarta de lo Penal para asegurar que no se iba a fugar si quedaba en libertad ya que se considera inocente y siempre ha “dado la cara”. “Nunca he sido militante de ETA y menos dirigente, he sido un mero sindicalista, conmigo ustedes no van a tener ningún miedo, aquí o donde me toque seguiré luchando por mi país, por la paz y por las soluciones democráticas, nunca voy a eludir la acción de la justicia”, dijo.
Su abogado, Iñigo Iruín, señaló que si Díez Usabiaga hubiese querido fugarse “lo hubiese tenido muy fácil”. “Ha tenido cuatro días para marcharse y no lo ha hecho, no hay riesgo de fuga”, señaló el letrado.
OTEGI EN EL CALABOZO
De forma complementaria, el tribunal comunicó esta a Arnaldo Otegi la condena a diez años de prisión que le ha sido impuesta por un delito de integración en organización terrorista en grado de dirigente por intentar reconstruir la formación ilegalizada a las órdenes de ETA.
Otegi recibió la sentencia en los calabozos de la Audiencia Nacional, a donde fue trasladado desde la cárcel de Logroño, según informaron fuentes de jurídicas.
El tribunal notificó asimismo la sentencia en los calabozos de la Audiencia Nacional a Miren Zabaleta, hija del líder de Aralar Patxi Zabaleta y una de las dirigentes emergentes de la izquierda abertzale; a la extesorera del PCTV, Sonia Jacinto; y a Arkaitz Rodríguez, exresponsable de Haika y presunto miembro de Ekin, todos ellos condenados a ocho años de prisión como autores de delitos de integración en organización terrorista. El tribunal notificó la resolución a Sonia Jacinto, la quinta condenada, el pasado viernes.
Los tres absueltos también acudieron a la Audiencia Nacional para recibir la sentencia que les absuelve en el “caso Bateragune”. Tras recoger la resolución absolutoria, el portavoz de la izquierda abertzale Txelui Moreno, el electricista y exconcejal de HB en Astigarraga (Guipúzcoa) José Manuel Serra y la activista de Etxerat, Amaia Esnal, permanecieron en la Audiencia Nacional para asistir el juicio que se está celebrando contra 11 jóvenes acusados de integrar un grupo de violencia callejera.