La OCDE elogia el "éxito" del fin del programa del rescate de Portugal

Lisboa, 8 jul.- El secretario general de la OCDE, el mexicano Ángel Gurría, elogió hoy en Lisboa el "éxito" del fin del programa del rescate de Portugal, pero advirtió de que el país debe mantener los esfuerzos para aumentar la productividad.

Los ajustes, aplicados bajo la supervisión de la UE y del Fondo Monetario Internacional (FMI), terminaron "con éxito" y el país debe "aprovechar el esfuerzo" de la estabilización de las cuentas públicas, defendió Gurría en rueda de prensa.

"Este es un mensaje fundamental, hay que mantener el rumbo en todos los aspectos que constituyen la productividad", afirmó el dirigente de la organización internacional, que se entrevistó hoy con el primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, y el presidente, Aníbal Cavaco Silva.

Para Gurría, el aumento de la productividad debe fundamentarse en la competitividad, la innovación, la competencia y cuestiones relacionadas con el mercado de trabajo y los impuestos, entre otros elementos.

Según su análisis, hay señales como la "muy importante" bajada de los intereses de la deuda lusa que demuestran que el país va por el "buen camino".

No obstante, expresó la preocupación de la institución por el montante de la deuda privada en Portugal, sobre todo, de las empresas lusas, que se sitúa en un nivel superior al 200 % del PIB.

Por otra parte, descartó que sea recomendable un aumento del salario mínimo en el país frente a las demandas de los partidos de la oposición, la patronal y los principales sindicatos de Portugal.

El Gobierno portugués ha aceptado negociar con los agentes económicos y sociales una subida del salario mínimo, fijado en 485 euros, con el que viven cerca de 600.000 personas,

Gurría consideró, sin embargo, que "la única manera" de subir los salarios de manera sostenible, a largo plazo, es aumentar la productividad.

A su parecer, el "gran problema" económico de Europa durante los últimos quince años reside en una pérdida de competitividad por haber aumentado los salarios a un mayor ritmo que la productividad.

"Los países, como Alemania, que mantuvieron los salarios bajos y la productividad, aumentaron la competitividad. No tiene misterio", argumentó.

Portugal cerró el pasado 17 de mayo el programa del rescate concedido en 2011 por la UE y el FMI, después de tres años de aplicar una dura batería de recortes para controlar el aumento del déficit y reducir el gasto público.