El triunfalismo de Ciudadanos tras las elecciones europeas, autonómicas y municipales tras lograr casi 2.800 concejales y ser el protagonista de la coalición de derechas que ha permitido al PP mantenerse en la Comunidad de Madrid y recuperar el ayuntamiento, no oculta lo que es una realidad dentro del partido: ha quedado lejos de poder dar el ‘sorpasso’ a la formación de Pablo Casado y convertirse en los líderes de la oposición a las posibles coaliciones de izquierda de PP y Unidas Podemos. Más bien al contrario, el papel de la formación de Albert Rivera va a ser clave para que el PP sobreviva a la debacle y se mantenga, además de en Madrid, en los otros dos feudos en los que corría serio peligro de caer, como Murcia y Castilla y León, además de Aragón, pero en ninguno de ellos ha logrado superar en votos o escaños al PP.
Un somero repaso a los resultados por CCAA y en los principales municipios confirma que la formación de Albert Rivera va a ser fundamental en la formación de gobiernos en muchos lugares como partido bisagra. Los datos oficiales le colocan con mayoría absoluta en 115 municipios y relativa en otros 35, algo que puede ser significativo si tenemos en cuenta que hace cuatro años apenas tenían representación fuera de Cataluña. Al final, Ciudadanos ha tenido el apoyo de algo más de 1,8 millones de votos en toda España en las elecciones municipales, con 2.795 escaños, muy lejos de los 4,2 millones de las generales y por debajo de los 5 millones de papeletas que ayer contabilizó el PP o los 6,6 millones que acumuló el PSOE.
El propio Albert Rivera hacía alusión en la noche electoral de este domingo a los votos del 28-A, más que a los logrados en las municipales y autonómicas, para lanzar el compromiso de que “la próxima vez que abramos las urnas, os prometo que va a ser para gobernar, después de hacer oposición a Sánchez e Iglesias”. Fuentes cercanas a la formación advertían nada más conocer los datos que el problema estaba en que con esos resultados, sin dejar de ser un gran avance para el partido naranja, se produje la paradoja de que no cubren el objetivo de convertirse en el primer partido de la oposición, que es algo que siempre ha estado en la mente de Rivera y su cúpula.
Pendientes de Vox en Madrid y en la UE
Con buenos datos y sin ‘sorpasso’, la mayor parte de los analistas advertían que la presencia de Ciudadanos en la vida política y su papel de oposición a nivel nacional y regional va a depender de los pactos a los que sea capaz de llegar en las próximas semanas, con un hándicap importante: en una gran parte de los casos, incluido Madrid, la negociación pasa por “hacerse la foto” con la extrema derecha de Vox. La mayor parte de esos acuerdos van a ser una reproducción del acuerdo de Andalucía, donde Ciudadanos mantiene las distancias con la formación de Abascal a sabiendas de que cualquier acercamiento puede ser utilizado en su contra en el ámbito nacional.
El otro gran triunfo de la noche para Ciudadanos ha sido el paso de 2 a 7 eurodiputados, con el economista Luis Garicano a la cabeza, que se van a integrar dentro del grupo de los liberales demócratas en Estrasburgo, con el objetivo principal declarado en toda la campaña y este mismo domingo de servir de freno para los populismos. Uno de los avances que más preocupan en la UE es el triunfo de Le Pen en Francia, la formación ‘amiga’ de Vox que, como ellos, cuestiona la validez de la unión.
Fuentes de la oposición socialista ya han aprovechado en varias ocasiones la contradicción que para la situación de Ciudadanos y sus pactos con Vox a nivel nacional puede tener el enfrentamiento que se produzca a nivel europeo, un camino que a partir de ahora van a vigilar con más razones.
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