Sube el malestar en el PSOE por la "reforma exprés" y A.Gutiérrez votará "no"

  • Veinticuatro horas después de que el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pidiera una "reforma exprés" de la Constitución para limitar el déficit, muchos diputados y dirigentes del PSOE se han mostrado abiertamente contrarios a esta propuesta, entre ellos Antonio Gutiérrez, que se opondrá.

Eva Santos

Madrid, 24 ago.- Veinticuatro horas después de que el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pidiera una "reforma exprés" de la Constitución para limitar el déficit, muchos diputados y dirigentes del PSOE se han mostrado abiertamente contrarios a esta propuesta, entre ellos Antonio Gutiérrez, que se opondrá.

Gutiérrez, quien no repetirá como diputado del PSOE, se ha sumado a las dudas sobre la forma y el fondo de esta reforma constitucional, que han cuestionado ya los tres diputados de la corriente Izquierda Socialista: Juan Antonio Barrio de Penagos, José Antonio Pérez Tapias y Manuel de la Rocha.

Junto a ellos, el expresidente del Parlamento Europeo Josep Borrell, que fue candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, ha dicho desde Santander que no comparte la propuesta de fijar un tope de déficit en la Constitución que y no entiende "qué ha cambiado" para que el Gobierno plantee una medida que hasta ahora rechazaba y que, de aprobarse, espera que se someta a referéndum.

En declaraciones a Efe, Antonio Gutiérrez ha anunciado su voto en contra a la reforma, cuya toma en consideración se debatirá el martes 30 de agosto en un pleno extraordinario del Congreso.

Gutiérrez ha arremetido duramente contra el Gobierno de Zapatero por poner de nuevo al grupo socialista en una brete: "O me apoyas o me hundes", ha opinado quien fuera secretario general de CCOO, en cuya opinión esa disyuntiva dinamita el debate de ideas sobre el contenido de la reforma.

Convencido de que es "una auténtica barbaridad" que Zapatero asuma los planteamientos de la canciller alemana, Angela Merkel, Gutiérrez ha juzgado que limitar el déficit en la Carta Magna es un camino "profundamente equivocado", que postergará "sine die" la gobernanza económica europea.

Tras considerar que esa modificación constitucional es un "disparate" que no puede "ni entender ni votar", Gutiérrez ha avisado de que se está poniendo gravemente en cuestión la credibilidad de la izquierda, "al asumir un axioma ideológico de la derecha y metiéndolo en la Constitución".

Además, ha vaticinado que al establecer un límite constitucional de déficit y deuda se está poniendo en "peligro" que España pueda seguir atendiendo en el futuro sus compromisos sociolaborales.

Gutiérrez no está afiliado al PSOE y lleva en el Congreso desde 2004, cuando Zapatero le llamó para ir en la lista socialista por Madrid, pero no cree que vuelva a repetir como diputado, ni por ese partido ni por ningún otro como IU o Equo.

Ha argumentado, en este contexto, su desacuerdo con muchas de las políticas socialistas que se están llevando a cabo en los últimos tiempos, lo que le llevó, de hecho, a abstenerse el año pasado en la convalidación del decreto ley de la reforma laboral.

Pese a todo el debate interno que ha generado la reforma constitucional en las filas del PSOE, sólo Gutiérrez ha anunciado públicamente su voto contrario.

Falta por ver si los otros diputados socialistas que no están conforme con esta medida cumplen o no la disciplina de grupo a la hora de votar la reforma o si apoyarán la convocatoria de un referéndum, tal y como van a plantear algunos grupos minoritarios.

Tampoco ha sido aplaudida la propuesta por el exministro Jordi Sevilla, en el pasado uno de los hombres de confianza de Zapatero, quien en su cuenta de Twitter se pregunta por qué "la mayor crisis económica provocada por el sobreendeudamiento privado instigado por la banca privada se arregla prohibiendo la deuda pública".

Mostrar comentarios