Yihadismo. El instituto elcano pide actuar frente a un reto que afecta a la seguridad interior de españa

El investigador principal de terrorismo internacional del Real Instituto Elcano, Fernando Reinares, solicitó este lunes a los líderes reunidos en la Cumbre Unión Europea Vecindad Sur que avancen en la “construcción del consenso internacional necesario” para afrontar un reto que afecta la “seguridad interior” de países como España.
Así se pronunció Reinares, en declaraciones a Servimedia, acerca de las principales conclusiones que cabe esperar de la Cumbre Unión Europea Vecindad Sur celebrada hoy en Barcelona y a la que asisten los jefes de la diplomacia de los Estados miembros de la UE y de la orilla meridional del Mediterráneo.
En ese sentido, Reinares subrayó que “a corto plazo” cada uno de los países afectados por la amenaza del yihadismo debe contar con los “imprescindibles instrumentos y agencias”, tanto judiciales como policiales y de inteligencia para combatirla.
Del mismo modo, afirmó que los países del sur de Europa “pueden y deben ofrecer una asistencia extraordinariamente valiosa” a los de la ribera sur del Mediterráneo. Ello, desde su punto de vista, debe producirse en el contexto de una “efectiva cooperación internacional que debe trascender el ámbito bilateral para ser efectivamente multilateral”.
En el caso de España, Reinares consideró que la operación policial contra el yihadismo llevada a cabo la pasada semana, demuestran que “existe el riesgo de que se produzca algún acto de terrorismo” similar a los ocurridos en Bruselas, Ottawa, Sidney o París.
Reinares sostuvo que los “principales focos de radicalización y reclutamiento yihadista” en España, “donde el terrorismo relacionado con dicha orientación ideológica está registrando una gran transformación, se encuentran principal aunque no exclusivamente” en Ceuta, Melilla y el área metropolitana de Barcelona.
A su vez, Reinares manifestó que existe una estrategia global contra el terrorismo aprobada en el seno de Naciones Unidas y revisada el pasado año, aunque su “implementación queda por debajo del óptimo necesario”, especialmente en escenarios como el Norte de África o debido a la actividad de instituciones como la Liga Árabe o la Organización para la Cooperación Islámica.
A ello se añade el hecho, según Reinares, de que ante la violencia yihadista en países como Siria o Iraq, “los muy diversos intereses nacionales y la complejidad de las alianzas existentes en el conflictivo ámbito de Oriente Medio –especialmente, pero no sólo, en relación con la fractura entre suníes y chiíes – que inciden directamente sobre esos países, impiden tanto un posicionamiento como una acción común ante el problema”.