En el 5,25%

El Banco de Inglaterra mantiene los tipos contra pronóstico en una votación reñida

La autoridad monetaria sigue los pasos de la Reserva Federal (Fed) al optar por no mover los tipos pese a que la mayoría de economistas esperaba un nuevo aumento para contener una inflación que roza el 7%.

Sede del Banco de Inglaterra.
Sede del Banco de Inglaterra.
DPA vía Europa Press

El Comité de Política Monetaria (MPC) del Banco de Inglaterra ha optado por la prudencia y por mantener los tipos de interés en el nivel actual pese a la alta inflación. En su reunión que finalizó el 20 de septiembre de 2023, el MPC votó por mayoría de 5 a 4 por la decisión de mantener en el 5,25% la tasa en una de las votaciones más reñidas que se recuerdan en el banco central.  Cuatro miembros prefirieron aumentar la tasa bancaria en 0,25 puntos porcentuales, hasta el 5,5%, que era la previsión del consenso de analistas para esta reunión.

Por otro lado, el Comité también votó unánimemente a favor de reducir el stock de compras de bonos del Gobierno del Reino Unido realizadas con fines de política monetaria y financiadas mediante la emisión de reservas del banco central, en 100.000 millones de libras durante los próximos doce meses, hasta un total de 658.000 millones de libras, según el comunicado del banco central.

El Banco de Inglaterra (BoE) pone de esta manera fin a una racha de 14 aumentos consecutivos de las tasas de interés después de que los nuevos datos mostraran que la inflación ahora está por debajo de las expectativas pese a que roza el 7%. El Banco había estado subiendo las tasas de manera constante desde diciembre de 2021 en un intento por controlar la inflación, llevando su tasa de política principal del 0,1% a un máximo de 15 años del 5,25% en agosto. La libra esterlina caía un 0,7% frente al euro y el dólar estadounidense poco después de la decisión.

"Hay signos cada vez mayores de algún impacto de una política monetaria más estricta en el mercado laboral y en el impulso de la economía real en general. El MPC seguirá vigilando de cerca los indicios de presiones inflacionarias persistentes y de resiliencia en la economía en su conjunto, incluido el endurecimiento de las condiciones del mercado laboral y el comportamiento del crecimiento de los salarios y la inflación de los precios de los servicios", señala la institución.

El banco central estima que el PIB del Reino Unido disminuyó un 0,5% en julio y el PMI de producción de S&P Global/CIPS cayó en agosto. "Otros indicadores de encuestas empresariales siguen siendo consistentes con un crecimiento positivo del PIB. Si bien algunas de estas noticias podrían resultar erráticas, los funcionarios del banco ahora esperan que el PIB aumente solo ligeramente en el tercer trimestre de 2023. También es probable que el crecimiento subyacente en la segunda mitad de 2023 sea más débil de lo esperado", apunta en su análisis el BoE.

La inflación en Reino Unido cayó del 7,9% en junio al 6,7% en agosto, 0,4 puntos porcentuales por debajo de las expectativas en el momento de la reunión anterior del Comité. La autoridad que dirige Andrew Bailey califica como "mucho más débil de lo esperado" el informe del IPC de agosto. La inflación del IPC de servicios aumentó del 7,2% en junio al 7,4% en julio, pero disminuyó al 6,8% en agosto, 0,3 puntos porcentuales menos de lo esperado en el Informe de agosto. 

"Algunos de esos movimientos están vinculados a servicios como tarifas aéreas y alojamiento que tienden a ser volátiles durante el período de vacaciones de verano", comenta la institución. El Banco de Inglaterra espera que la inflación caiga significativamente más en el corto plazo, lo que refleja una menor inflación anual de la energía, a pesar de la renovada presión al alza de los precios del petróleo, y nuevas caídas en la inflación de los precios de los alimentos y los bienes básicos.

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