El coronavirus ha asestado un fuerte golpe a todo el Ibex 35. Los inversores han entrado en modo 'pánico' y se han lanzado a vender la mayoría de su exposición a bolsa ante el miedo de que el COVID-19 provoque una crisis económica y la oleada de ventas ha desplomado el precio de las acciones. Este jueves el Ibex 35 se desploma un 6%, su mayor caída de toda su historia, y acumula un hundimiento cercano al 36% desde el 19-F, es decir, en menos de un mes. ¿Las consecuencias? Las compañías del Ibex han perdido alrededor de 230.000 millones de euros en términos de capitalización desde dicha fecha. Las más damnificadas: Inditex, que se deja más de 33.000 millones y Santander, que supera los 26.500 millones. Además, otras cuatro superarían los 10.000 millones: BBVA (20.600), Iberdrola (casi 20.000), Telefónica (14.000) y Amadeus (12.700).
El coronavirus ha teñido de rojo todo el Ibex 35. La eléctrica presidida por Ignacio Galán, que luchaba a duras penas por aguantar en positivo en la apertura pero que tras la decepción del BCE cae un 9% en este 2020. Esta evolución evidencia como los inversores han decidido buscar 'refugio' en Iberdrola ante el temor a que la volatilidad y la incertidumbre hayan venido para quedarse más tiempo del esperado.
Junto a la eléctrica, solo otras dos compañías evitarían las caídas de dos dígitos. Cellnex, una de las revelaciones del Ibex en los últimos años, sucumbe al rojo al retroceder más de un 6,5%. La compañía de infraestructuras de telecomunicaciones inalámbricas ha vivido un éxito bursátil que ha disparado su capitalización hasta los 14.615 millones de euros, sobrepasando a Repsol y situándose a nada de adelantar a otro gigante español como es Ferrovial.
Tras Cellnex, solo Viscofan estaría entre las que mejor se comportan en el selectivo. La compañía de envoltura de productos cárnicos retrocede poco más de un 6,3% y es la que menos bajista en el Ibex 35. Para ver las siguientes habría que remontarse a Acciona (-13%) y a Colonial (-20%).
En el lado opuesto destaca, por encima del resto, Sabadell, que cotiza en mínimos históricos. El banco presidido por Josep Oliu se desploma más de un 55% en poco más de dos meses y su capitalización está por debajo de los 3.000 millones. La segunda sería ACS ya que la empresa presidida por Florentino Pérez acusa un castigo del 52%, hasta los 16,745 euros por título y estaría cerca de perder los 5.200 millones en términos de valor de mercado.
El resto de compañías están más expuestas al coronavirus. ArcelorMittal, que acusa el desplome del precio de las materias primas, cae un 50%, mientras que las dos siguientes se ven penalizadas por la delicada situación que atraviesa el sector turístico, como es el caso de Meliá Hotels e IAG. La cadena hotelera retrocede cerca de un 49%, al igual que la aerolínea, y las perspectivas no son nada halagüeñas acerca de que el brote del coronavirus pueda estar llegando a su fin. Otros títulos como Repsol, Bankia y Mediaset se desploman por encima del 47%.
En el Mercado Continuo, y al ser las compañías de mucho menos tamaño, las caídas son aún más significativas, aunque ninguna supera el castigo de Sabadell, que sería la más bajista de toda la bolsa española en 2020. Compañías como Nyesa se desploman un 53% mientras que otras como Tubacex, Codere o Quabit superan el 47% en poco más de dos meses.
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