Desplome del 4% 

Crash bursátil del coronavirus: el Ibex 35 vive su peor día desde el Brexit en 2016

Nueva jornada de caídas en Europa y el Ibex 35
Nueva jornada de caídas en Europa y el Ibex 35

Pánico por lo desconocido y ante las certezas del impacto económico que conlleva. Los inversores han despertado a la realidad del coronavirus y su expansión hasta Italia después de varias semanas de expansión de los focos en China, Japón o Corea del Sur. Las bolsas europeas y Wall Street vivieron su particular ‘lunes negro’ con caídas que no se veían, en el caso del Ibex 35, desde el día después al referéndum del Brexit en 2016. El índice de referencia de la Bolsa española se desplomó un 4,07%, hasta 9.483 puntos, en su tercera jornada a la baja después de que jueves y viernes también cerró en rojo.

Se trata la mayor serie de caídas desde que comenzó la crisis hace seis semanas, aunque por primera vez ha tocado de lleno a Occidente. La Bolsa de Milán es la más perjudicada por las ventas de los inversores con una caída del 5,43%, seguida de bolsas periféricas fuera del euro como la danesa (-4,2%) o la sueca (-4,3%). Entre las grandes plazas, París y Fráncfort cayeron en torno al 4%, al igual que el paneuropeo Euro Stoxx 50. El precio del petróleo Brent, la referencia europea, se desplomó un 5%, hasta 55 dólares, mientras que el oro, tradicional activo refugio, se revalorizaba un 1,5%, hasta 1.675 dólares. El Vix, apodado el índice del miedo financiero porque mide la volatilidad de los derivados, se disparó un 36%, hasta superar los 23 puntos.

Todos los grandes valores bajan: Inditex el 6,24%, Repsol el 5,35 %, Banco Santander el 4,27%, BBVA, el 3,87%, Iberdrola el 2,24% y Telefónica el 1,85%. Las acciones más castigadas han sido las de la aerolínea IAG, con un descenso del 9,43 %, Arcelor, el 6,76 %, MeliàHotels, el 7,82 %, Mediaset, el 7,28 % y Amadeus el 5,38%. 

El bono español a diez años ha aumentado su rentabilidad el 1,9 por ciento y alcanza un rendimiento del 0,21 por ciento. La prima de riesgo española se mantenía en 65 puntos básicos, con el interés exigido al bono a diez años en el 0,204%, mientras que la cotización del euro frente al dólar se colocaba en 1,0858 'billetes verdes'. La prima italiana y la griega se dispararon frente a la caída del resto de indicadores.

Una caída de impacto

El coronavirus Covid -19 (SARS-Cov-2) ha logrado en las últimas semanas lo que no había logrado ninguna otra epidemia: generar una parálisis económica como nunca antes, sobre todo, por los protocolos radicales de contención que han adoptado diversos gobiernos. Desde hace semanas, el cierre de fábricas en China, de canales de suministro y comerciales han provocado un parón en sectores como el automóvil o el turismo, los más afectados por esta crisis. La falta de visibilidad sobre la contención sobre la evolución de la alerta sanitaria y está provocando que se extiende desde hace semanas por más de 30 países, supera los 2.500 fallecidos y roza los 80.000 pacientes infectados en todo el mundo.

El Servicio de Estudios de Mapfre prevé un impacto de más de 200 puntos básicos (pbs) de menos crecimiento acumulado en China, lo que llevaría a situarse por debajo del 4% en 2020. “Los efectos directos en el resto del mundo provendrían de la contracción de las importaciones, en especial de la importación de servicios (turismo), a la par que de los retrasos en la exportación de productos con insumos intermedios con origen en China. Así, el efecto directo global podría ubicarse en torno a 50 pbs menos de crecimiento, hasta estabilizarse en tasas cercanas al 2,6% durante el 2020”, explican desde la aseguradora española. Cada décima que retrocede el PIB chino supone hasta 12.000 millones de euros de menor crecimiento económico... solo en China. 

Una de las voces más autorizadas en tiempos de crisis es Warren Buffett. El legendario inversor que invirtió en Goldman Sachs en 2008 salvándolo de la quiebra cuando cayó Lehman ha calificado este lunes de como “aterradora” la crisis del coronavirus, pero recuerda una máxima que sigue al pie de la letra: “Eso no debe afectar a lo que haces con sus inversiones. Siempre llegan nuevos problemas, lo que debes pensar es dónde estarán esas compañías dentro de cinco o diez años”, dijo en declaraciones a la  cadena estadounidense CNBC.

No lo tienen tan claro desde la gestora Unigestión. “Históricamente, las epidemias han demostrado ser excelentes oportunidades de compra para los mercados, pero el brote del coronavirus no se puede comparar con ninguna otra. Como ejemplo, el virus del SARS golpeó en un momento en que los mercados bursátiles mundiales comenzaban a tocar fondo después del estallido de la burbuja de las puntocom y fue cuando los mercados comenzaron a subir. Por el contrario, con el coronavirus, la economía china y el comercio mundial ya estaban tambaleándose, las valoraciones estaban muy altas y las bolsas se encontraban en la fase de expansión más larga de la historia”, apuntan.

Mostrar comentarios