Las acciones de Grifols profundizan en las caídas este jueves después del rebote de la semana pasada tras la firma de KPMG de las cuentas de 2023. La compañía del Ibex se resiente de las rebajas de calificación crediticia de Fitch y de S&P en las últimas horas. Al cierre del mercado, el grupo de hemoderivados se dejó un 9,34% en la que es ya su tercera jornada consecutiva de pérdidas. El valor se quedo en 7,204 euros por título y un valor de capitalización de 4.400 millones. Tampoco ayuda un informe publicado por Deutsche Bank en el que los analistas de la entidad dudan de la capacidad del grupo cumplir con sus objetivos de generación de caja.
Esta madrugada S&P anunciaba la rebaja de B+ a B la calificación crediticia de la compañía del Ibex y mantenía la perspectiva en negativa ante la expectativa de la compañía no sea capaz de reducir su endeudamiento al ritmo previsto. Esta mañana Fitch ha seguido el ejemplo de su compatriota y ha reducido la nota del grupo español hasta B+ desde BB-, manteniendo asimismo la perspectiva en negativo. La reflexión para dar el paso ha estado muy alineada con la de S&P y ha aludido al desapalancamiento más lento este año por un volumen de generación de caja más lento.
Dos movimientos que se producen -y complican- la refinanciación de Grifols, más teniendo en cuenta que podrían llegar nuevos recortes porque Moody's también podría replantearse su nota para el grupo.
Golpe de los analistas de Deustche Bank
Con este caldo de cultivo, los títulos de Grifols también se han visto golpeados por un informe negativo del Deustche Bank, que pone en duda la capacidad del grupo para conseguir sus objetivos de generación de caja. En consecuencia, los analistas recomiendan ahora "vender" los títulos de la española: hasta el momento habían aconsejado mantenerlos.
"Las perspectivas de flujo son un reto para la compañía si quiere dar una apariencia de sostenibilidad, con una deuda que supera los 9.000 millones de euros", recoge Bloomberg del informe del banco de inversión. Asimismo, la reciente reformulación de las cifras del cuarto trimestre, aunque fueron menores, se sumaron al cuadro de confusión y requirieron que el Deutsche Bank actualizar su modelo por segunda vez en una semana.
Deutsche Bank es la firma que estima un precio objetivo menor, 7 euros, entre los que cubre Bloomberg. El consenso de expertos lo sitúa en doce meses en los 17,35 euros.
