Alta tensión pero reacción contenida. Los precios del petróleo registran este lunes una reacción contenida y ligeras caídas pese la escalada del conflicto en Oriente Medio por el ataque directo de Irán a Israel del pasado sábado con cientos de drones y misiles. Los operadores destacan que no se han destruido infraestructuras relacionadas con la industria energética después de que la ofensiva fue neutralizada en su mayor parte por los sistemas de defensa israelíes y aliados.
Pese a que no se perciben problemas sobre el suministro, el mercado está pendiente de la posible respuesta israelí sobre Irán, uno de los grandes productores de crudo del mundo. No obstante, los operadores esperan subidas de precios por el temor a que la represalia se centre en las infraestructuras del país islámico. A las 7:30 horas, el futuro con entrega en un mes sobre el petróleo Brent, referencia europea, cotiza con ligeros descenso del 0,5%, hasta 90,1 dólares, aunque la negociación es contenida a esta hora. El barril de Dubai, de seguimiento en el Golfo Pérsico, se mueve por encima de los 90,2 dólares, también con pocos cambios.
El ataque masivo con misiles y drones del sábado llevado a cabo por Irán contra Israel marca una nueva y potencialmente explosiva fase en el conflicto entre ambos países. A lo largo de décadas, Israel e Irán han estado involucrados en una guerra encubierta, llevando a cabo ataques mutuos en su mayoría de forma discreta y, en el caso de Irán, frecuentemente a través de intermediarios. Sin embargo, esta dinámica cambió con la respuesta de represalia de Irán a un ataque ocurrido el 1 de abril, el cual se le atribuyó a Israel y en el que varios oficiales iraníes perdieron la vida en Damasco (Siria). Ahora, la respuesta de Israel a este asalto con misiles y drones podría determinar si la próxima etapa del conflicto será una guerra total.
La calma en los mercados petroleros tiene que ver con que Teherán realizó un golpe militar relámpago el sábado y al poco de lanzar su ataque dijo que había concluido la operación. Pese a que el Gobierno de Benjamin Netanyahu apuntó a un contraataque israelí, Estados Unidos se ha mostrado reacio a apoyarlo y la prensa estadounidense destaca que el Gobierno de Joe Biden no apoyaría una acción militar de vuelta. Los inversores se aferran a la idea de que ha podido ser un evento aislado, dentro de la guerra de seis meses que libra Israel contra Hamás en Gaza.
