La escalada de la tensión en Oriente Medio de este fin de semana tras la 'respuesta' de Irán al ataque de Israel a su embajada en Siria con el lanzamiento de 300 drones contra una base militar y la movilización de tropas de EEUU coincide con el fin de semana y por tanto con las bolsas cerradas. Los pocos datos que se manejan a estas horas apuntan a una sesión del lunes con los números rojos como protagonistas, al menos en las plazas asiáticas. Al mediodía del domingo, los futuros sobre el parqué de Japón estarían apuntando a una apertura con descensos superiores al punto porcentual. El petróleo, el oro y el dólar, que avanza posiciones con fuerza contra el euro en los últimos días, también podrían registrar una elevada volatilidad.
Los parqués, en pleno arranque de la presentación de resultados trimestrales, el aumento de la conflictividad geopolítica y tras acumular varios meses de subidas ininterrumpidas, ya optaron por recoger beneficios la semana pasada. El español Ibex se dejó un 2% (fue el peor entre las principales plazas europeas), mientras que en Wall Street el Dow Jones y el S&P 500 se dejaban un 2,37% y un 1,56%, respectivamente. La temporada de números hasta marzo, la subida del dólar contra el euro y las continuadas advertencias de que el mercado norteamericano podría haber alcanzado unos precios que hablan de una posible sobrevaloración, puede reforzar los argumentos de los vendedores para continuar recogiendo beneficios.
Junto al conflicto, además, los mercados continuarán buscando pistas sobre los futuros movimientos de los bancos centrales, cuyos planes podrían verse alterados si el conflicto en Oriente Medio aumenta y el escenario geopolítico varía.
En los próximos días, de acuerdo con EFE, se espera que se publiquen numerosos datos macroecónomicos europeos, entre ellos las cifras de producción industrial en la zona euro, la encuesta ZEW de Alemania, que podría seguir reflejando la mejora de las expectativas de su economía, la tasa de desempleo en el Reino Unido y el dato de inflación en la eurozona, que se conocerá el miércoles.
En su reunión de la semana pasada, Christine Lagarde, la presidencia del Banco Central Europea (BCE) fue muy cauta a la hora de comprometerse a que las bajadas de tipos llegarán en el mes de junio, como anticipa el mercado, que ya comienza a dudar de su intensidad. También se están reajustando las previsiones sobre tipos en Estados Unidos y los analistas ven en la fortaleza de la economía estadounidense una sombra para que la Fed comience con los recortes que, en paralelo, está impulsando al alza al euro.
La UE pide evitar la escalada
La Unión Europea (UE) ha pedido a ambos países que eviten una escalada del conflicto que "no puede ser del interés de nadie", de acuerdo con EFE. La agencia avanza que los 27 han condenado "en los términos más energéticos el ataque" y calificaron esta ofensiva como una "escalada sin precedentes y una amenaza para la seguridad regional", de acuerdo el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell.
"La UE reitera su compromiso con la seguridad de Israel. En esta situación regional tan tensa, una mayor escalada no puede ser del interés de nadie. Instamos a todas las partes a que actúen con la máxima moderación", añadió Borrell.
En cuanto a Rusia ha defendido el derecho de Irán a responder, aunque también ha abogado por evitar una expansión del conflicto.
