La píldora económica

Seis meses de buena inflación en EEUU y un euro que cae si no baja tipos Powell

Powell, durante la reunión del comité de la Fed esta semana.
Seis meses de buena inflación en EEUU y un euro que cae si no baja tipos Powell.
Britt Leckmann / Fed vía La Información

Los datos de inflación en EEUU son muy positivos. De hecho, la inflación de los últimos seis meses en términos anuales ya está por debajo del 2%, pero siempre es importante ser prudente y el presidente de la Reserva Federal americana, Jay Powell, en la rueda de prensa posterior a la reunión de la institución dejó claro que su escenario central no era reducir los tipos de interés en la próxima reunión de marzo, aunque no lo descartaba si los datos apoyasen adelantar esa decisión.

Los mercados se quedaron algo sorprendidos, pero siguieron descontando que existía una sustancial probabilidad de que sí se produjese la bajada de los tipos americanos en marzo. La continuidad de esa expectativa tenía una influencia clara en la cotización del euro dólar, que estaba rozando los 1,10 euros por dólar. Claramente, cambios en las expectativas del diferencial de tipos de interés a corto plazo estaban siendo el factor más importante en la evolución del euro/ dólar en las últimas semanas. El euro tiende a apreciarse cuando las expectativas de reducción de tipos se traducen en una disminución del diferencial positiva de los depósitos en dólares frente a los denominados en euros. Igualmente, los tipos de interés a largo plazo continuaron con su moderación pues la expectativa de bajada de tipos de interés a corto plazo influye decisivamente en los tipos de interés a largo plazo.

Sin embargo, todas las expectativas cambiaron el viernes con la publicación de los datos de crecimiento del empleo de enero en Estados Unidos, con 353.000 nuevos puestos de trabajo creados. Esto señala una fortaleza no prevista de la economía americana (el consenso de analistas esperaba menos de 200 mil puesto creados) que podía poner en peligro la moderación de la inflación, porque los salarios suben para atraer más trabajadores. De hecho, el crecimiento de los salarios medios por hora se aceleró hasta el 0,6% mensual. Esto hizo que su crecimiento interanual aumentara al 4,5% desde el 4,3% anterior. Algunos factores pueden haber explicado este repunte; 22 estados aumentaron su salario mínimo en enero, lo que afectó a unos 10 millones de trabajadores. Otro país donde los salarios mínimos explican la inflación.

Por todo lo anterior, la curva de tipos de interés experimento una subida en todos los plazos hasta el punto de que los mercados dejaron de descontar con un 100% de probabilidad que los tipos fuesen a bajar en marzo o mayo, y que solo lo harán en junio. Este dato de empleo por tanto se tradujo en una apreciación del dólar y en una subida de tipos de interés a corto y largo plazo.

Pero ¿tiene sentido esta lectura tan dramática de cambios en las perspectivas de evolución de tipos de interés en un país donde la productividad aumentó a una tasa anualizada del 3,2% en el cuarto trimestre, y del 4,9% en el tercero de 2023? Dicho de otra manera, la evolución salarial en EEUU es compatible, dada la alta productividad, con seguir esperando con confianza que la inflación se sitúe en el 2% muy pronto. Pero es que además el índice de costes laborales (ECI) que incluye salarios y otros costes, como pagos por ajustes de plantilla y otros beneficios, solo está aumentando al 3,5% anualizado en el cuarto trimestre de 2023: recuerden que en ese trimestre la productividad aumentó el 3,2%

Por todo lo anterior, creo firmemente que las expectativas de bajadas de tipos de interés volverán a mejorar, y esto se traducirá en recortes en todos los plazos y en un euro más fuerte. En ningún caso espero que la fuerte moderación de la inflación en Europa, (2,8% la interanual general en enero y 3,3% la subyacente) lleve a que se adelante la bajada de tipos a la de Estados Unidos, y eso incluso sabiendo que la zona euro, con los datos preliminares, no creció en el cuarto trimestre de 2023, y que probablemente los datos definitivos muestren una recesión.

Mi razonamiento es doble. En primer lugar, la zona euro no tiene más remedio que seguir con retraso la política monetaria americana, porque las condiciones financieras globales las fijan los americanos; y en segundo lugar, porque aunque soy muy optimista con las perspectivas de reducción de inflación, hay una sombra que me preocupa mucho, la productividad del trabajo en Europa es baja o nula, y eso con subidas salariales del 5 y el 6% pone un límite a la reducción de la inflación en 2024, salvo sorpresas. Esto es especialmente relevante en aquellos sectores donde los salarios son una parte muy importante de los costes, y aquí incluyo los alimentos tanto elaborados como no elaborados, mucho de los cuales requieren mucha manipulación.

Pero no todo son cifras, hay un factor que tiene una influencia grande en las próximas decisiones de la FED, si es que ya no ha afectado a la toma de decisiones en marzo. El factor es muy conocido y se llama Donald Trump, que ya ha criticado a Jay Poweil diciendo que “no le extrañaría que bajase tipos para ayudar a los demócratas”. Trump, que nombró a Powell en su cargo, nunca le demostró gran cariño como quedó patente cuando en agosto de 2019, escribió -cuando los tipos de interés estaban altos y en medio de las guerras comerciales con China- que su "única pregunta es, quién es nuestro mayor enemigo: Powell o Xi Jinping”, el presidente chino. En marzo, ya sabremos quienes son los candidatos a presidente de EEUU y parece que uno de ellos no renovara al presidente de la FED, pase lo que pase, pero seguimos sin saber cuando bajaran los tipos… aunque será pronto.

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