OPINION

El cambio del consumo audiovisual: ¿el verano es una nueva temporada alta para los estrenos de TV?

Fotografía de Stranger Things, Netflix
Fotografía de Stranger Things, Netflix
Netflix
Fotografía de Stranger Things, Netflix
Cielo de verano.

El éxito de Stranger Things llegó en verano. Un fenómeno rotundo que ejemplifica un cambio de consumo en la televisión. Las series ya no siempre tienen que esperar a septiembre, las nuevas formas de ver la televisión abren una nueva temporada alta veraniega para propuestas de las grandes compañías.

El espectador se lleva la tablet de vacaciones y aprovecha estos periodos sin obligaciones laborales para empacharse de contenidos audiovisuales que no ha podido seguir por falta de tiempo durante el año.

Entonces, ¿las cadenas deben empezar a plantearse aumentar sus estrenos entre junio y agosto? A priori puede parecer que sí, pero es más complejo. La ficción sí se consume mejor cuando llega el calor en los sistemas bajo demanda, pero no así en la televisión tradicional o en otro tipo de contenidos como  programas de entretenimiento, que siguen disminuyendo su consumo cuando el verano se empieza a acercar.

Se abre un nuevo escenario en el que hay dos vías de acción para las cadenas y plataformas: el visionado de la televisión tradicional baja en el periodo estival como siempre. También en los programas que se consumen en directo o tienen una segunda vida después ‘a la carta’. Así que no tiene sentido estrenar un gran formato de actualidad cuando las temperaturas suben, a no ser que se quiera testar y rodar contenido estable a partir de septiembre. 

Pero no sucede lo mismo con la ficción, que puede alcanzar un repunte en las vacaciones, especialmente cuando rompe con las costumbres de su día a día.

El público quiere desconectar de la rutina en vacaciones. Y rutina también son esos programas que van más pegados a la actualidad. En cambio, ese mismo público desconecta viendo series que le trasladan a otros universos donde imaginar o, incluso, recordar otras etapas vividas más ingenuas o más añoradas.

Es la reinvención sigilosa de los hábitos a la hora de ver la televisión. Ahora las vacaciones son una buena ocasión para lucir determinados productos de ficción. La era de la televisión bajo demanda ha revolucionado el sector y, en los tiempos que vienen, las series sí deberán abrir por vacaciones.

Mostrar comentarios