Liga femenina

La brecha salarial del fútbol femenino sigue siendo 50 veces mayor que la media

A pesar de haber puesto fin a la huelga en la Liga F con un nuevo convenio, lo cierto es que el salario medio de las jugadoras de fútbol en España dista mucho de lo que perciben los hombres en el fútbol profesional.

La brecha salarial del fútbol femenino sigue siendo 50 veces mayor que la media
La brecha salarial del fútbol femenino sigue siendo 50 veces mayor que la media
La brecha salarial del fútbol femenino sigue siendo 50 veces mayor que la media

A pesar de la huelga que ha tenido en vilo las dos primeras jornadas de la Liga F, la brecha salarial entre el fútbol femenino y el masculino sigue siendo 50 veces mayor que la media, tras la firma del nuevo convenio. Un cisma que contrasta con el reciente éxito de la Selección Femenina de fútbol, que hace menos de un mes ganaba el primer Mundial de Fútbol para nuestro país y la RFEF, aumentando el atractivo económico de la liga femenina y situándonos como una potencia global.

Resulta especialmente chocante porque, según el último informe de CCOO, la diferencia de sueldo entre hombres y mujeres en cualquier sector de nuestro país se sitúa en el 20,9%. (27.322 euros brutos anuales frente a 22.601). Sin embargo, en LaLiga EA Sports (Primera División masculina) se cobra de media 5,1 millones de euros brutos al año, mientras que las jugadoras de la Liga F solo ganan 40.000 euros. Una diferencia de más del 1.000% entre ambos sexos.

¿Cuál es el salario de un jugador de fútbol?

El salario medio de un jugador de fútbol de LaLiga EA Sports (Primera División Española) en la temporada 2023/24 se puede deducir teniendo en cuenta los datos de masa salarial total actualizados por la patronal en septiembre (2.554 millones de euros) para las 500 fichas disponibles para los clubes españoles. Un dato que podría ser incluso mayor, si tenemos en cuenta que varios jugadores de varios equipos no han podido ser inscritos en la competición por las reglas de 'Fair Play Financiero' de Javier Tebas.

Por eso, cuando las flamantes campeonas del mundo hablan de "cambios estructurales" en el seno del fútbol femenino, el principal foco parece el pulso abierto con la RFEF para cambiar un organigrama federativo que consideran caduco. Sin embargo, al mismo tiempo es una denuncia hacia la invisibilización del fútbol femenino en sí. De ahí que la huelga de las jugadoras de la Liga F para mejorar sus condiciones salariales haya coincidido en el tiempo con el órdago a la federación. Cabe recordar que las ganadoras del Mundial recibieron una prima que es poco más de la mitad que la de los hombres de La Roja.

Las jugadoras tienen un salario mínimo 10 veces menor que el de los hombres

Sea como fuere, lo cierto es que la gesta del Mundial supone un impulso sin precedentes para la profesionalización del fútbol femenino en España. Es verdad que desde hace un par de años la Liga F cuenta con una estructura profesional similar a la de la Liga EA Sports. Pero el hecho de que las jugadoras ya no se tengan que ver obligadas a compaginar el fútbol con otra profesión no significa que las condiciones laborales sean las ideales.

Empezando por el plano estrictamente económico: el convenio que se acaba de firmar fija un salario mínimo de 21.000 euros brutos para este año, mientras que el de los hombres acaba de ascender a 182.000 euros. Hasta la semana pasada, las jugadoras de la máxima división del fútbol en nuestro país cobraban un mínimo de 16.000 euros brutos anuales. Y muchos clubes (especialmente los menos poderosos) hacían uso de ese límite a la baja, ya que los ingresos por patrocinios tampoco permitían acercarse mínimamente a los salarios de los hombres.

Parece que, después del nuevo convenio y de ganar un Mundial, tampoco.

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