Bruselas aprueba ayudas de 81 millones a los agricultores españoles por la sequía

La Comisión Europea (CE) ha aprobado ayudas por valor de 81 millones de euros para España, con el fin de compensar las pérdidas que la sequía ha provocado en los sectores agrícola y ganadero. El país se ha convertido, así, en el primero en beneficiarse de este tipo de apoyos por valor de 330 millones, que figuran en el reglamento comunitario y que irán a parar a los productores de 22 países.

El objetivo de esta decisión es compensar al sector primario de los Veintisiete por el incremento de costes, la inflación, la guerra de Ucrania y fenómenos meteorológicos extremos (entre ellos la sequía). Las ayudas fueron objeto de debate y respaldo en el último Consejo de Ministros de Agricultura de la UE, en Luxemburgo; una parte está enmarcada en la reserva de crisis de la Política Agraria Común (PAC) para naciones fronterizas con Ucrania, afectadas por las importaciones de ese país.

La pasada semana, la organización agraria Asaja ya reclamó a los ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea (UE), reunidos en Valladolid, una "política valiente" para afrontar el problema de la sequía. En concreto, la organización solicitó "concienciación y soluciones ante el grave problema de falta de agua, que afecta a España pero también a países del arco mediterráneo, como Francia, Italia y Grecia, e incluso a Alemania o Países Bajos".

"Es el momento de adoptar medidas para preservar y mejorar los recursos hídricos de la UE e invertir fondos europeos en infraestructura que optimicen la acumulación de agua y aprovechen las escasas reservas", según Asaja. De acuerdo con los datos  que maneja el Observatorio Europeo de la Sequía, en más de la cuarta parte del territorio de la Unión Europea se dan condiciones de alerta, mientras que el 8% se encuentra ya en estado de alerta.

"La falta de lluvias y las altas temperaturas en el sur de Europa abocan a un cambio urgente en las políticas sobre gestión hídrica (...) Es necesario pactar de forma valiente y decidida, con una política común de anticipación, en vez de tener que habilitar, año tras año, ayudas para paliar la sequía" apuntan los agricultores.