La compraventa de viviendas cae un 6,6% en febrero en plena escalada del Euríbor

La subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) para hacer frente a la inflación, la consiguiente escalada del Euríbor -el principal indicador al que están referenciados los préstamos a tipo variable en España- y el encarecimiento de la oferta de hipotecas a tipo fijo marcan el paso al mercado inmobiliario. La compraventa de viviendas ha caído un 6,6% en febrero en relación al mismo mes del año pasado hasta un total de 50.186 operaciones, de acuerdo con los datos que ha hecho públicos este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Con este retroceso interanual, la compraventa de viviendas retorna a tasas negativas después de que en enero el número de operaciones alcanzase las 56.300, habiéndose incrementado un 6,6% más con respecto a igual mes del ejercicio anterior. El descenso de la compraventa de viviendas de febrero se ha debido a la caída tanto de las operaciones sobre pisos de segunda mano como las realizadas sobre viviendas nuevas.

Las operaciones con viviendas usadas descienden un 5,5%

En concreto, la compraventa de viviendas usadas bajó un 5,5% en el segundo mes del año, hasta sumar 40.479 operaciones. Mientras que las transacciones realizadas sobre pisos nuevos disminuyeron un 11,1%, hasta las 9.707 operaciones. El 92,2% de las viviendas transmitidas por compraventa en febrero fueron viviendas libres y el 7,8%, protegidas. 

En total, la compraventa de viviendas libres bajó un 6,5% interanual, hasta las 46.255 operaciones, en tanto que la compraventa de viviendas protegidas retrocedió un 7,9%, hasta sumar 3.931 transacciones. En tasa intermensual (febrero sobre enero), la compraventa de viviendas cayó un 11%, su mayor descenso en un mes de febrero de los últimos cinco años.

Las únicas comunidades autónomas en las que aumenta el número de compraventas de viviendas en febrero son Principado de Asturias (19,9%) y Comunitat Valenciana (2,9%). Por su parte, La Rioja (–23,6%), Cantabria (–17,9%) y Extremadura (–16,0%) registran los mayores descensos. 

Un año de enfriamiento en el ladrillo

Los expertos ya han venido advirtiendo de un más que previsible enfriamiento del mercado inmobiliario en España a lo largo de este año después de un ejercicio 2022 en el que muchos de los indicadores marcaron récord de más de una década. Fue el caso, precisamente, de las compraventas, que aumentó un 14,7% en el conjunto del ejercicio hasta superar las 650.000 operaciones, en lo que supuso su mayor cifra en 15 años. Sin embargo, el encarecimiento de la financiación -el BCE venía subiendo los tipos desde julio- ya había impactado en el mercado en el último mes del año, cuando las ventas de inmuebles empezaron a resentirse. 

Desde la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) confirmaban esta misma semana a 'La Información' que prevén una caída de las transacciones este año, después de dos ejercicios de fuerte crecimiento, mientras que los precios de los inmuebles "se desacelerarán fuertemente en relación a 2022". Esto último, que implica un "cuasi estancamiento, y no una caída abrupta", responde a que en el mercado -y a diferencia de lo que sucedió durante la pasada crisis financiera- no hay una situación de burbuja ni de sobreoferta. En sentido inverso, la renta disponible de los hogares sigue cayendo en términos reales, y los tipos de interés subirán todavía más dado que la inflación subyacente ha vuelto a tocar un nuevo máximo histórico en la Eurozona en marzo en el 5,7%.