Las consecuencias del coronavirus están siendo catastróficas. Más allá de las innumerables pérdidas de vida, la pandemia también está dejando efectos sociales y económicos que dificultan la vida diaria de las personas. En España, muchos trabajadores se encuentran en ERTE e incluso muchos de ellos han sido despedidos antes de que se pusiera en marcha la medida.
Esta situación también se ha dado en otros países y la historia de Lorna Hewitt es ejemplo de ello. Esta mujer, que vive en un municipio de Oregón, fue despedida de un restaurante ante la crisis del coronavirus. Así, se quedó sin empleo y sin ninguna otra fuente de ingresos, pero encontró un trabajo a media jornada en una tienda de alimentación, según UPI.
En ese lugar es donde la mujer comienza a fabricar mascarillas para sus compañeros de trabajo ante la escasez en las farmacias de la zona. Su jefe se dio cuenta de que esto podía ser una fuente de ingresos, así que decidió poner a la venta las que cosía Lorna para hacer frente a la demanda.
Un día, Lorna comprar un boleto con el dinero ganado tras la venta de mascarillas. Aunque no le sobraba el dinero, se gastó un par de dólares en un boleto de la lotería Keno-8, un tipo de juego de azar muy conocido en algunos estados de Estados Unidos. "No juego mucho, pero pensé que estaba haciendo algo para ayudar, quizá podía ganar", explica.
Y así fue. Su ayuda fue recompensada con el premio del boleto: 127.000 dólares (unos 115.000 euros). Aun así, la afortunada no se cansa y quiere seguir ayudando con la fabricación de mascarillas. "Mis mascarillas son populares y quiero seguir haciéndolas, pero tal vez pueda hacer también otras cosas", relata.
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