Cuando acaba de darse el pistoletazo de salida a la temporada de presentación de resultados del cuarto trimestre por parte de las entidades españolas y consensos como los de Bloomberg prevén que 2023 cerrarse con récord de beneficios para el sector, la presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelán, ha recordado que su rentabilidad no es sólo una "primera línea de defensa", sino que constituye también una "fortaleza de país" y supone una buena nueva para el dinamismo de la economía nacional.
Así lo ha manifestado durante su intervención en un desayuno organizado por Nueva Economía Fórum que ha tenido como protagonista a José Manuel Campa, presidente de la Autoridad Bancaria Europea (EBA). El propio regulador ha puesto en valor las "buenas" perspectivas para el sector este año, aunque con "prudencia", en un contexto en el que la economía española está aguantando el frenazo de otras grandes del entorno y habría logrado crecer alrededor del 2,4% el pasado ejercicio, según avanzó el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, presente también en el foro.
Kindelán ha hecho hincapié en que esa fortaleza que muestra hoy día el sector obedece a que se ha enfocado en lo importante después de los años de reestructuración y consolidación que sucedieron a la pasada crisis financiera. La banca ha centrado sus esfuerzos en lograr unos sólidos niveles de capital, de liquidez y una sólida gobernanza. Así, ha puesto en valor que sin rentabilidad tampoco habrá sostenibilidad y solvencia futura para el sector.
De este modo, la responsable de la patronal bancaria ha resumido que contar con un sector financiero fuerte "es una garantía y una fortaleza para el país", dado que permitirá que este siga creciendo y creando empleo, con la banca apoyando al mismo tiempo a las familias y empresas.
Preparase ante una eventual subida de la morosidad
A lo largo de su intervención, José Manuel Campa, ha destacado también la buena noticia que suponen la rentabilidad del sector y el hecho de que la morosidad siga bajo control pese a la subida de tipos más acelerada desde la creación del euro (el Banco Central Europeo los ha elevado en diez ocasiones hasta situar las tasas de referencia en el 4,5%).
Con todo, el presidente del regulador sí que ha considerado que los márgenes de las entidades podrían haber tocado techo ya o estarían a punto de hacerlo y ha llamado a las entidades a reforzar su capital y prepararse ante la posibilidad que la tasa de mora se eleve en un futuro próximo por el empeoramiento de las condiciones económicas y el incremento que ya se ha producido en el precio del dinero. En un tono y con un mensaje muy similar, el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, ha destacado que "el sector financiero en Europa no es una debilidad para las economías sino lo contrario, es una fortaleza o resiliencia".
